Antes del 30 de junio, los líderes esperan que Rusia "acuerde un mecanismo de verificación, supervisado por OSCE, del acuerdo del alto el fuego y para el control efectivo de la frontera"; que "devuelvan a las autoridades ucranianas los tres pasos fronterizos ucranianos" de Izvarino, Dolzhanskiy, Krasnopartizansk, la liberación de los rehenes, incluidos todos los observadores de la OSCE y el lanzamiento de "negociaciones sustanciales" para aplicar el plan de paz del presidente ucraniano, Petro Poroshenko.
"El Consejo evaluará la situación y, si es requerido, adoptarán las decisiones necesarias. El Consejo Europeo subraya su compromiso de reunirse en cualquier momento para más medidas restrictivas significativas", advierten en la declaración que han adoptado sobre Ucrania tras discutir la situación en el país con Poroshenko.
Los líderes europeos han recordado que la Comisión Europea, el Servicio Europeo de Acción Exterior y los Estados miembros han estado llevando a cabo el trabajo preparatorio sobre "medidas dirigidas" tal como como reclamaron en marzo "de forma que más pasos se puedan dar sin retrasos".
Apoyo al plan de paz de Poroshenko
Por otra parte, han manifestado su "apoyo" al plan de paz anunciado por el presidente ucraniano y han "tomado nota de la declaración del presidente ruso de apoyo en principio" al mismo, así como "la decisión del Consejo de la Federación (Cámara Alta) de revocar la autorización para utilizar las fuerzas rusas para intervenir militarmente en Ucrania".
"El Consejo Europeo lamenta que el alto el fuego, a pesar de que lo han respetado las autoridades ucranianas, no ha llevado al cese pleno de hostilidades militares" y ha apelado a "todas las partes a comprometerse de forma genuina en la aplicación del plan de paz y cimentar el cese de las actividades militares", recoge la declaración que han adoptado sobre Ucrania.
Los líderes europeos han apoyado la supervisión del plan de paz por parte de la OSCE, así como su apoyo al mismo y para "el establecimiento de controles fronterizos efectivos" y han exigido a Rusia que utilice "activamente su influencia sobre los grupos armados ilegalmente y cese el flujo de armas y combatientes a través de la frontera para poder lograr resultados rápidos y tangibles" para rebajar la situación en el este de Ucrania.
También han reiterado su compromiso a apoyar la estabilización económica de Ucrania y por ello han saludado el desembolso de dos tramos de ayuda comunitaria "significativos" por valor de 750 millones de euros para apoyar el Contrato de Consolidación del Estado y de ayuda macrofinanciera, así como la reunión de coordinación de donantes de alto nivel que acogerá Bruselas el 8 de julio para apoyar a Ucrania.
Asimismo, han respaldado el trabajo de la Comisión para poner en práctica la política de no reconocimiento de la anexión "ilegal" de Crimea y Sebastopol por parte de Rusia el pasado mes de marzo y, en este sentido, han apoyado la decisión de prohibir la importación de productos de Crimea y Sebastopol que no cuenten con certificados de Ucrania, aprobada por los ministros de Exteriores de los Veintiocho el lunes. La prohibición está en vigor este este miércoles.