Saif al Islam ha sido juzgado en rebeldía y ha sido condenado por crímenes de guerra cometidos durante la revuelta que acabó con el régimen del coronel Gadafi, asesinado sin juicio a manos de milicianos rebeldes libios en Sirte el 20 de octubre de 2011.
Los otros altos funcionarios del gobierno de Gadafi, entre ellos el exjefe de los servicios de inteligencia Abdullah al-Senussi y el antiguo primer ministro, Baghdadi al-Mahmoudi también han sido condenados a la pena capital.
Saif al-Islam había reiterado que prefería ser juzgado por un tribunal internacional en vez de enfrentar la justicia libia, pero estos prometieron un juicio justo.
El hijo mayor de Gadafi se encuentra preso en una cárcel de Zintan, al suroeste de Trípoli, desde su captura en noviembre de 2012, a la espera de que se ejecute la sentencia.