El barco de la ONG alemana Mission Lifeline rescató el jueves a estas personas de lanchas hinchables al norte de la costa libia. Malta se ha negado a prestar ayuda a la embarcación porque los rescatistas incumplieron la orden de esperar a la llegada de la Guardia Costera libia, lo que habría avocado a los inmigrantes a regresar a África.
Por su parte, la Guardia Costera italiana habría respondido con un contundente "No nos llamen más" a las peticiones de auxilio del Lifeline, según revela el periódico italiano 'La Repubblica'.
Mientras tanto la tripulación del buque ha informado desde su cuenta oficial de Twitter de la situación de emergencia en la que se encuentran: "Algunas existencias están agotadas, hoy tenemos que repostar y necesitamos mantas, medicamentos, etcétera".
Tras la alerta, las autoridades maltesas les han entregado alimentos."El Lifeline ha incumplido las normas al ignorar las directrices de Italia en la zona de recate de Libia. Debería avanzar hacia su destino original para evitar una escalada. A pesar de que no tiene responsabilidad, Malta acaba de aportar suministros humanitarios y las Fuerzas Armadas de Malta están realizando una evacuación médica de una persona", ha explicado el primer ministro maltés, Joseph Muscat, a través de Twitter.
En respuesta, la ONG Mission Lifeline que gestiona el 'Lifeline' ha asegurado que el buque "participó en dos casos de búsqueda y rescate y siguió estrictamente las normas internacionales de seguridad marítima y las instrucciones de Salvamento Marítimo de Roma y de la Guardia Costera de Libia". "Nos dijeron explícitamente que pusiéramos rumbo al norte y lo hicimos", ha subrayado la ONG. Además, han confirmado la aportación de alimentos por parte de Malta,"pero no ha habido necesidad médica de una evacuación" como afirma Muscat en su cuenta de Twitter.
Durante la noche se han sucedido las negociaciones y contactos entre Italia, Malta y España aunque aún no se logrado un acuerdo, pero Italia no ha mostrado disposición alguna a abrir sus puertos siguiendo así la política aplicada al 'Aquarius', otro barco de salvamento marítimo gestionado por ONG --Médicos Sin Fronteras y SOS Mediterranée-- que entre el 8 y el 9 de junio rescató a 630 migrantes en la misma zona.
El Aquarius finalmente atracó en Valencia, aunque las ONG subrayaron que no era operativo mantener este puerto español como lugar de destino debido a la gran distancia que se encuentra de Libia.
El caso del 'Aquarius' ha reabierto el debate en el seno de la UE sobre la política de migración y asilo. La Comisión Europea ha convocado parar este domingo en Bruselas una minicumbre en la que participarán doce países, incluido España, para intentar desbloquear la reforma de la política comunitaria en esta materia.