En esta hermosa bahía australiana es donde Christine Armstrong desapareció tras el supuesto ataque de un tiburón. Nadaba con un grupo de amigos y se separó de ellos. Jason Edmund, inspector de Policía de Nuevo Sur de Gales, explica que "normalmente daba la vuelta nadando. El resto del grupo continuó hasta el muelle y después regresó". Edmund señala que "se cruzaron con un tiburón de unos 3 ó 4 metros. El grupo se juntó para defenderse y volvieron a la orilla". Los compañeros de Christine dieron la voz de alarma, aunque realmente no vieron el ataque del tiburón. Decenas de equipos de emergencia la han buscado por mar y aire, aunque la búsqueda de la mujer, de 63 años, ha tenido que suspenderse a causa del mal tiempo. Christine era miembro de un club de surf. Andrew Redmonds, miembro del club Tathra indica que "estaba muy comprometida con el entrenamiento en el club. Ha hecho unas 300 patrullas y nadaba habitualmente". Cada año se producen unos dos ataques mortales de tiburón en Australia.