El pulso entre los opositores y la policía se tensa hasta tal punto que la revuelta popular desborda las calles de Kiev, sobre todo al oeste del país.
Los opositores, organizados en tromba, fuerzan las puertas de seguridad para conseguir tomar edificios oficiales, y lo han conseguido en 10 de ellos pese a estar infestado de policías. Consiguieron tomar anoche el ministerio de justicia e incluso, la ministra sugirió detectar el estado de excepción en el país si no lo abandonaban. Ya han salido pero han bloqueado la entrada principal para que el gobierno no lo recupere.
Este martes, el parlamento debatirá las exigencias de la oposición: elecciones anticipadas y nueva constitución.