El día de la exhumación: Franco sale del Valle de los Caídos

  • Tras la batalla judicial, Sánchez cumple su promesa

  • Hablamos con las víctimas, que empiezan a ser resarcidas en el dolor

43 años, 11 meses y un día después de ser enterrado, Franco sale del Valle de los Caídos. Todo el proceso se ha desarrollado con normalidad. Algunas decenas de nostálgicos se han acercado al Valle y también esperan en el cementerio de El Pardo, con gritos de vivas al dictador y algunas pancartas. Poco más. Como anécdotas, destacar que el féretro no ha sido cambiado, que Tejero ha sido recibido con vítores y la familia ha podido sacar a Franco a hombros. Un helicóptero ha sido finalmente el medio elegido para trasladar a Franco.

El dictador es el único de toda Europa cuya tumba se encontraba en un mausoleo. Así, Pedro Sánchez cumple la promesa hecha hace año y medio y se empieza a resarcir el dolor de las víctimas.

Un sistema hidráulico ha levantado la losa de granito de 1.500 kilos. No hay imagen del momento. A todos los presentes, incluidos los 22 familiares del dictador, se les ha requisado el móvil y la zona del presbiterio está cubierta con una carpa.

Sólo acceden los operarios, dos familiares, Cristóbal y Merry Martínez Bordiú, un forense de la Audiencia Nacional, la ministra de Justicia que da fe como notaria mayor del Reino y dos autoridades del Estado. Sin honores ni banderas.

Si las condiciones meteorológicas lo permiten, el féretro será trasladado a El Pardo en helicóptero, sino se hará en un coche fúnebre hasta este panteón. Aquí, los Franco podrán despedirle en la más estricta intimidad. En una misa co-oficiada por el prior del Valle y el sacerdote Ramón Tejero, hijo del golpista Antonio Tejero.

El operativo, el Gobierno calcula que esta operación cuesta poco más de 63.000 euros. Así, Pedro Sánchez cumple su promesa de junio de 2018. Le ha costa más de un año por la batalla judicial abierta por la familia del dictador y por el prior del Valle de los Caídos. El traslado cuenta hoy con el apoyo del poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

Las víctimas y sus familias empiezan hoy a resarcir su dolor. Hemos hablado con Nicolás Sánchez-Albornoz, historiador y víctima del Franquismo, que hoy tiene 93 años. Él nunca habla del Valle de los Caídos. Para él siempre será Cuelgamuros. Es el nombre del valle donde se ubica y es como lo llamaban ellos, los 20.000 obreros presos que durante 20 años levantaron la basílica, la abadía y la cruz de 150 metros, inaugurada por Franco el 1 de abril de 1959, coincidiendo con el Día de la Victoria de la Guerra Civil.

Tras cuatro meses de trabajos forzosos, Sánchez-Albornoz, en 1948 fue uno de los presos que se fugó a Francia.

A su muerte, en 1975, Franco fue enterrado allí, pero no estaba sólo. Hay más de 33.000 cadáveres, unos 28.000 son franquistas y el resto republicanos. Fueron trasladados por el franquismo para simbolizar la reconciliación de los dos bandos, desde fosas comunes sin el consentimiento ni conocimiento de sus familias.

Y el helicóptero se llevó a Franco

El helicóptero que traslada el féretro de Francisco Franco ha despegado del Valle de los Caídos a las 13.40 horas en dirección al cementerio de Mingorrubio El Pardo, donde será inhumado en el panteón donde reposa desde 1988 el cadáver de la mujer del dictador, Carmen Polo.

En la aeronave, un helicóptero Cougar del Ejército del Aire destinado al traslado de autoridades y personalidades, normalmente Casa Real y Gobierno, viajan la ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, el secretario general de la Presidencia, Félix Bolaños, el subsecretario del Ministerio de la Presidencia, Antonio Hidalgo, el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Angel Oliver. En representación de la familia del dictador, su nieto Francis Franco y el letrado Luis Felipe Utrera Molina.

Mientras esperaban a entrar en el helicóptero, los representantes del Gobierno se han mantenido a una notable distancia de Francis Franco y el abogado de la familia, Luis Felipe Utrera-Molina, e incluso se ha podido ver discutiendo a Utrera Molina con Bolaños.

A pesar de que el atáud de madera donde se enterró a Franco en 1975 está dañada por el paso del tiempo --las imágenes permiten ver una raja en su base-- la familia ha decidido conservar la caja y trasladarla tal cual a Mingorrubio, a pesar de que el Ejecutivo había dispuesto un nuevo ataúd ante la previsión de que el original estuviese dañado.

Dentro de la caja de madera hay otra de zinc sellada en cuyo interior está el cuerpo de Franco y que el Gobierno no tenía intención de abrir en caso de que se conservase, como era probable, en buen estado.

El féretro ha salido de la Basílica después de que los operarios lo aseguraran colocando una tabla de madera sobre su base. Se ha cubierto con una tela marrón y un pendón con el escudo de los Franco, sobre el que la familia depositó una corona de laurel decorada con lazos en forma de flor y con los colores de la bandera nacional.