Volkswagen, la marca que más vendida en España, ha anunciado que llamará a todos los conductores con un coche "trucado". Desde la OCU aconsejan a los conductores que si la compañía les llama para desinstalar “rápido y gratis” el software de la polémica nunca pague nada por la reparación, si le dejan si coche más de un día puede pedir uno de sustitución y, en ningún caso, deben modificar la potencia de su vehículo. Además, es recomendable que se exija un documento que desglose qué le han hecho al coche.
Aún quedan por valorar las implicaciones económicas, ya que podría subir el impuesto de matriculación de estos vehículos al cambiar su categoría de eficiencia. Además, el coche pudo comprarse con una ayuda vinculada a sus características poco contaminantes, como el Plan PIVE. Si se dan algunas de estas circunstancias, la organización de consumidores explica que los propietarios de los coches no deben asumir estos gastos, si los hubiera.
La Organización Europea de Consumidores (BEUC) ha exigido una investigación exhaustiva por parte de la Comisión Europea sobre las emisiones contaminantes y el consumo de combustible de los coches que se venden en Europa.
En España, el Ministerio de Industria ha creado una comisión para rastrear cuántos coches pueden tener instalado ese sistema informático que falsea las emisiones de gases contaminantes. En cualquier caso, estos coches pasarían la ITV, ya que incluso trucados los niveles siguen estando muy por debajo de los límites europeos.