Rehn ha explicado que es "prematuro" desvelar si Bruselas dará a España hasta dos años más para reducir el déficit al 3% del PIB, y ha sugerido que la prórroga está condicionada a que el plan de reformas, que el Gobierno tiene previsto aprobar el 26 de abril, sea adecuado.
"Pese a las reformas llevadas a cabo en 2012 y más allá, España tiene desequilibrios excesivos. Por ello, son necesarias reformas adicionales en algunas áreas y estamos trabajando estrechamente con el Gobierno español para respaldar la corrección de estos desafíos formidables", ha explicado el vicepresidente económico.
"España sufre desafortunadamente un nivel muy alto de paro, que exige medidas muy decididas para apoyar el crecimiento sostenible y la creación de empleo, entre ellas continuar con la reforma del mercado laboral y adoptar otras medidas para mejorar la situación del empleo", ha subrayado Rehn.
El Ejecutivo comunitario examinará el próximo 29 de mayo las medidas que presente España en su plan de reformas y decidirá entonces los próximos pasos en este procedimiento sancionador por desequilibrios excesivos. Rehn no ha querido adelantar si entonces podría darse un paso más hacia las sanciones, que pueden llegar hasta el 0,1% del PIB (1.000 millones en el caso de España).
En todo caso, el vicepresidente económico ha subrayado que el Gobierno ha realizado "progresos sustanciales" en las reformas, que se tendrán en cuenta en la evaluación. Y ha admitido que "la existencia de desequilibrios excesivos depende en primer lugar de las variables económicas y sólo en segundo lugar de las políticas que se aplican".
Al ser preguntado por si la Comisión dará a España dos años más, hasta 2016 en lugar de 2014, para corregir el déficit, Rehn ha explicado que "es prematuro decir algo específico sobre esto". "En este contexto, las reformas estructurales que ayudan a impulsar el crecimiento sostenible y las finanzas públicas sostenibles tienen una gran importancia cuando evaluemos una duración con sentido en el ritmo de ajuste fiscal para cualquier país, y en este caso para España".
Rehn ha destacado que España ha reducido considerablemente en los últimos meses su déficit por cuenta corriente, que está a punto de corregirse, y que mantiene su cuota de exportaciones pese a la crisis. No obstante, ha destacado que el peso del sector exportador en el PIB español está alrededor del 30%, frente a más del 50% en el caso de Alemania.
"Este nivel relativamente bajo de las exportaciones en la economía española refleja el dominio de un crecimiento impulsado por el consumo en España antes y todavía en parte durante la crisis", ha apuntado el vicepresidente.