Ante las autoridades, con ayuda de un intérprete, dado que solo habla alemán, explicó que había visto cómo su progenitor agredía a su madre y que también tenía la intención de agredir a su hermano. Presuntamente, lo hizo con extrema violencia, golpeándoles con una roca. A la entrada de la cueva, las manchas de sangre corroboran el espeluznante relato que del menor. El presunto autor del asesinato había llevado allí a su familia porque tenía "regalos escondidos dentro", según ha contado la traductora del pequeño.