En Europa lo normal es que las averías de los automóviles sean causadas por el desprendimiento de alguna pieza o por su excesivo uso. En cambio en Zimbabwe, África, a esa lista de causas hay que sumarles otras procedentes del mundo animal, más concretamente aquellas relacionadas con las serpientes. Y es que una familia estaba viajando en coche cuando el conductor oyó un ruido extraño y notó un olor inusual, por ello detuvo la camioneta e inspeccionó el vehículo. Al levantar el capó, descubrió una aterradora sorpresa, una pitón africana de cuatro metros y medio que estaba acurrucada y enrollada encima del motor.