Lo que nunca te contaron de 'El exorcista': el asesino de homosexuales que figuró como extra en la película

  • Paul Bateson era el ayudante del doctor que trataba a la pequeña Regan en la película ‘El exorcista’

  • Años después de la grabación de la película, Bateson fue detenido por el asesinato de su amante: “Se le relacionó con el asesinato y descuartizamiento de seis homosexuales más, aunque nunca pudo probarse judicialmente”

  • Sigue ahora EN DIRECTO Cuatro

Carmen Porter ha traído hasta la nave del misterio en este último programa de ‘Cuarto milenio’ los secretos ocultos de la que posiblemente sea la mejor película de terror de todos los tiempos: ‘El exorcista’.

Sobre este film se han contado innumerables anécdotas, algunas de ellas, relatadas en el programa de Iker Jiménez, pero ninguna como la de Paul Bateson. Bateson era un radiólogo, sin ninguna relación con el mundo del cine, que apareció como extra en la película y que protagonizó una de las escenas míticas de ‘El exorcista’.

Junto a un doctor, Bateson realiza a Regan, la pequeña poseída por el maligno, unas pruebas médicas para averiguar qué le ocurre a esta niña con extraños comportamientos. Años después de la grabación de la cinta, Paul Bateson sería detenido por haber dado muerte a su amante homosexual.

Sin embargo, y aunque nunca pudo demostrarse judicialmente, a Bateson se le relacionó con el asesinato y descuartizamiento de seis homosexuales más años atrás: “Los restos de estos seis hombres fueron hallados en el río Hudson metidos en bolsas del hospital de Nueva York donde Bateson trabajaba como radiólogo”.

De ser así, Bateson habría actuado en la película de William Friedkin habiendo cometido el asesinato de seis hombres, seis presuntos amantes: “Bateson buscaba desesperadamente amor, y cuando sus amantes no le daban lo que necesitaba los asesinaba cruelmente”.

La infancia de Bateson, clave en su delirio asesino

Paul Bateson sufrió una dura infancia marcada por su padre, un hombre autoritario que jamás le dio cariño y que le obligaba a quedarse encerrado en casa escuchando ópera cuando el resto de niños salían a jugar.

Bateson no tardó en buscar consuelo en el mundo de las drogas y los suburbios de Nueva York hasta que, cansado de esa vida de descontrol, decidió estudiar y dedicarse al mundo de la radiología, algo que le valdría para actuar como extra en la película de ‘El exorcista’.

Bateson buscaba en los hombres el amor que no había recibido de su padre, pero enloquecía cuando esos amantes no le prometían amor eterno: “Él solo quería cariño, una pareja, buscaba amor en los hombres, cuando le rechazaban y le explicaban que simplemente se trataba de sexo, Bateson entraba en cólera y acababa con la vida de sus fugaces amantes”.

Por el único asesinato demostrado, Bateson fue condenado a 24 años de prisión, saliendo en libertad en 2003, momento desde el que su rastro continúa perdido.