El naturalista Álex Lachhein ha visitado una vez más la nave del misterio para hablarnos de algo que seguro muchos no podíamos ni imaginar. Hace no mucho en nuestro país, a finales del siglo XIX y principios del siglo XX era común que el ciudadano común acudiera a espectáculos, por llamarlos de alguna manera, en los que las fieras tenían un papel protagonista.
Las peleas de fieras, aunque nos suenen como algo lejano y propio de los circos romanos, estuvieron ocurriendo hasta no hace mucho en ciudades españolas como Madrid. Era común encontrar por las calles de la capital carteles que animaban a los ciudadanos a asistir a estar escalofriantes peleas. Toros contra osos, osos contra tigres, elefantes contra toros… cualquier pareja de animales salvajes podían servir para luchar ante la muerte con la única intención de entretener a los espectadores.
Álex Lachhein ha puesto un foco especial en la historia de la elefanta conocida como Pizarro. Se trataba de una hembra de elefante que se hizo célebre en el Madrid de la primera década del siglo XX por su fiereza a la hora de luchar contra toros salvajes.
A Pizarro la ataban con una cadena en el albero de la plaza de toros de Las Ventas en Madrid y allí esperaba las acometidas de los toros o de cualquier otra fiera que los organizadores del evento pensaran para ella.