Breach & Clear regresa con Deadline, una secuela zombi que nos pone a prueba

Marcos Antón (@emeanton) 28/07/2015 12:07

En 2014 se estrenó un juego de estrategia y táctica que cosechó interesantes valoraciones positivas, tanto en la crítica como entre los jugadores. Un año más tarde, Breach & Clear se reinventa con una secuela que repite universo, pero que nos enfrenta a una invasión zombie.

Este nuevo Breach & Clear repite firma con Gun Media y Mighty Rabbit Studios, y está editado por Gambitious y Devolver Digital. Alejado de los grandes lanzamientos del género táctico, Breach & Clear también repite fórmula, explotando la perspectiva isométrica y un ese aspecto gráfico repopularizado por el mundo indie. Superados los errores que el juego acusó durante su acceso anticipado, hemos podido disfrutar del título sin cuelgue y experimentar qué novedades nos ofrece.

Los zombis, fórmula de éxito

Si hay un elemento del imaginario jugón que está más de moda que nunca, ese es el de los infectados. Y no solo en los multijugador, sino también en los indies que aprovechan cualquier temática para colarnos al enemigo zombi y que el juego funcione, como ocurre con Guns, Gore & Cannoli. Por eso el aspecto policíaco de la primer entrega queda en un segundo plano y nos vamos a un apartado más fantástico.

En este caso, nuestro equipo táctico ha quedado encerrado en una ciudad infectada de zombis. Nuestra misión es sobrevivir al apocalipsis y localizar el origen de la infección para acabar con el enemigo. Precisamente por lo prolífico del género, quizás el juego pide un poco más de trabajo en la historia que nos plantea para lograr un efecto de inmersión mayor. Cuesta identificarse con el líder del escuadrón desde la primera toma de contacto, y eso dificulta nuestro avanzar.

Un acercamiento a la acción

Deadline sacrifica parte de su componente estratégico para llevarnos al mundo de la acción. Una apuesta que lo hace interesante para aquellos a los que no les gusta tener que apretar un botón para que el reloj siga corriendo, pero que resulta lento para los aficionados a la acción sin freno. Al final tenemos un modo de juego híbrido gracias a dos tipos de jugabilidad: el modo acción (lineal y sin parones) y el modo comando (en el que controlamos el tiempo). Tendremos que alternar entre los dos para que la experiencia de juego sea interesante, pero son demasiado diferentes entre sí. El modo comando es muy atractivo al principio del juego, aunque a veces llega a resultar tedioso y caeremos en el error de utilizar el modo acción y avanzar por el juego con menor profundidad, perjudicando nuestra experiencia.

La importancia de los escenarios

Abusemos o no del modo acción, si no hacemos uso del escenario y no planteamos bien la colocación de nuestros agentes de élite sobre el mapa, nos será difícil avanzar en el juego. Por eso el planteamiento estratégico del mapa sigue siendo básico independientemente del modo del que abusemos más. Eso sí, el juego pide a gritos un mayor trabajo en las texturas y la iluminación de los escenarios para que identifiquemos mejor las coberturas y mejoremos nuestro posicionamiento. También se echa de menos más trabajo en el apartado sonoro, tanto en el diegético (demasiado arcade), como en su banda sonora, con un toque de suspense que no termina de convencer.

El feedback de los jugadores

La primera actualización del juego llegó hace unos días con un objetivo muy claro por parte de los desarrolladores: continuar las conversaciones con los jugadores para estabilizar los errores tanto del modo campaña como del cooperativo multijugador. Por eso han anunciado una política de actualizaciones constante para tratar de depurar cuanto antes los problemas que surjan en un juego que estará así en constante postdesarrollo.

Conclusiones

Si te gusta el género, Breach & Clear: Deadline es una opción interesante. Eso sí, si ya jugaste al primero quizás pienses que la mejor presentación para Deadline hubiera sido un gran DLC o una expansión. Es curioso cómo el juego muta de piel para darle un aspecto apocalíptico y de supervivencia, pero esa piel no termina de encajar demasiado bien y se echa de menos un mayor trabajo en la narrativa de la historia y los personajes que le otorgue una identidad propia dentro del mundo zombi.

Eso sí, tampoco se merece las devastadoras críticas que ha recibido en algunos foros. Los desarrolladores han sabido escuchar algunas de las peticiones de los jugadores durante el desarrollo del juego y han lanzado un producto mejorable, pero que aun así te animamos a probar para que juzgues por ti mismo. Quizás el mayor problema de Deadline es que el Breach & Clear original era un gran juego y esta secuela se ha quedado corta respecto a las expectativas. Si hubiera funcionado mejor con un mayor desarrollo acompañado de un presupuesto más grande es algo que probablemente nunca sepamos.