Kiko Rivera va a mostrar cómo vive y, sobre todo, cómo cocina. Mientras todos piensan que va a elaborar un menú de altos quilates, el hijo de la cantante va a preparar una cena mucho más campechana... y menos elaborada. Como siempre, los 3.000 euros se repartirán al final de la velada aunque viendo el nivel culinario de esta edición, parece que va a ser una misión casi imposible para elegir el ganador.
Con su figura más estilizada y una buena dosis de humor, el cantante se desvivirá no por cocinar, pero sí por hacer de la cena un momento inolvidable para sus tres ilustres comensales, un gesto que todos valorarán de manera positiva. Como cierre de la cena, Kiko regalará a sus comensales las originales jarritas en las que servirá el postre, redondeando así una cena que lo perfila como posible ganador.
Como era de esperar, veremos en acción al DJ, que montará una discoteca en su propia casa, haciendo que, inevitablemente, sus invitados cierren la velada bailando y cantando en un ambiente de jolgorio y verbena. Eso sí, tal vez Kiko no mida lo suficientemente bien el efecto que podrá tener en Elena Tablada que suene una canción de su ‘ex’, David Bisbal… ¿Se lo perdonará la modelo o se lo tomará como una afrenta personal? ¿Y Toñi? ¿Soportará que no suene ningún ‘hit’ de Azúcar Moreno? Eso por no hablar de Julio Iglesias Jr., que tampoco escuchará ninguno de sus temas en la pista de baile…
Al finalizar la fiesta, será turno de saldar deudas y elegir vencedor. Ana Obregón y Rappel en la primera entrega y Antonia Dell’Atte junto a Fortu en la segunda aguardan al vencedor. ¿O habrá de nuevo dupla de vencedores?