'El Sapo' relata cómo incendió el Windsor y se sincera: "Yo no soy Santa Claus, jamás me arrepiento de nada"

‘El Sapo’ relata cómo incendió el Windsor y se sincera: “Yo no soy Santa Claus, jamás me arrepiento de nada”
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Dos décadas después del incendio del edificio Windsor en el centro de Madrid, Jon Imanol Sapieha Candela confirma que el autor de los hechos fue él y ha relatado con todo lujo de detalles cómo lo llevó a cabo.

El entrevistado se ha confesado con Nacho Medina y le ha explicado cómo contactaron con él para hacerle el “encargo”: “Me llamaron unas dos semanas antes y me dijeron que tenía que ser algo rápido”.

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Hicimos vigilancia del edificio para saber cuáles eran las ventanas que tenían luz (..) Sabíamosel sistema de rondas que tenían los guardias de seguridad por la noche y sabíamos cómo era el edificio”, explica.

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En total, éramos cinco personas que no tenían nada que ver con los otros robos que cometí. Era gente diferente. No tengo contrato de exclusividad con nadie. Ninguno era español. Mi equipo no suele tener españoles”, apunta.

Dice ‘El Sapo’ que conocía a la perfección el edificio por dentro, que estuvo días antes de llevar a cabo el incendio y que había escondido parte del material que necesitaba en los “falsos techos de la última planta” del Windsor.

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Tal y como explica, Jon Imanol Sapieha Candela fue muy concienciado de lo que iba a hacer y ha relatado cómo se preparó antes: “Yo suelo comer ligero cuando voy a actuar o no comer (..) Siempre trabajo los fines de semana”, aclara.

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Una vez dentro del edificio, subieron “por las escaleras paralelas al montacargas” y sin utilizar el sistema eléctrico: “Tardamos 40 minutos en subir porque llevábamos peso. Llevábamos ropa deportiva y de color oscuro”.

Cuando Nacho Medina le pregunta si le entraron ganas de echarse atrás en el último momento y no quemar el edificio, ‘El Sapo’ explica: “¿Arrepentimiento de qué? Yo no soy Santa Claus. Y vengo a trabajar y jamás me arrepiento de nada. Además, ya me habían pagado millones de euros y era tarde para arrepentirnos”.