El 12,7% de las mujeres ha experimentado violencia física o sexual; el 11,7%, económica; y el 20,9%, psicológica emocional
25N: Los lemas en las calles de toda España contra la violencia machista y el negacionismo
Los asesinatos machistas son solo la punta del iceberg de una violencia mucho más amplia y persistente que atraviesa a millones de mujeres. Así lo confirma la nueva Macroencuesta de Violencia contra la Mujer, presentada este miércoles por el Ministerio de Igualdad, que dibuja la radiografía más completa de esta realidad en España.
Los datos obtenidos son tan contundentes como alarmantes: una de cada tres mujeres mayores de 16 años ha sufrido algún tipo de violencia machista por parte de su pareja o expareja en algún momento de su vida. En cifras absolutas, son 6,4 millones de mujeres.
La encuesta, basada en casi 11.800 entrevistas, recoge experiencias de violencia física, sexual, psicológica y económica, sufridas de forma aislada o simultánea. Entre ellas, 2,7 millones de mujeres, casi el 13%, han padecido violencia física o sexual. Un maltrato que deja secuelas a al menos 1,6 millones de víctimas, que sufren consecuencias físicas o psicológicas.
Los datos reflejan la realidad frente al negacionismo. El machismo sigue siendo una realidad prevalente, transversal y que condiciona la vida de muchas mujeres
La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha subrayado el carácter estructural de esta problemática: “Los datos reflejan la realidad frente al negacionismo. El machismo sigue siendo una realidad prevalente, transversal y que condiciona la vida de muchas mujeres”.
Violencias dentro y fuera de la pareja
Según la macroencuesta, el 30% de las mujeres ha sufrido al menos un tipo de violencia (física, sexual, psicológica o económica) dentro de la pareja.
El 12,7% ha experimentado violencia física o sexual; el 11,7%, económica; y el 20,9%, psicológica emocional. Además, una de cada cuatro mujeres ha sido víctima de violencia psicológica de control.
Fuera del ámbito de la pareja, la violencia sexual también alcanza cifras preocupantes: el 14,5% de las mujeres mayores de 16 años la ha sufrido alguna vez en su vida, y un 7,4% la padeció durante la infancia. El 3,1% ha sido víctima de violación, mayoritariamente por parte de hombres conocidos; el 23,1% eran familiares, el 62,7% amigos o conocidos y solo el 12% desconocidos.
Además, una de las grandes conclusiones del estudio es la irrupción de la violencia machista digital. El 12,2 % de las mujeres ha sufrido acoso digital, con o sin connotaciones sexuales, y la cifra se dispara al 34,5 % entre las jóvenes de 18 a 24 años.
La violencia sexual facilitada por tecnología también es significativa: el 9,4 % recibió mensajes sexualmente explícitos sin consentimiento; el 2,9 % fue obligada a ver material pornográfico y el 2,1 % fue presionada para enviar contenido íntimo.

Violencia económica: una forma de control silenciosa
El 11,7 % de las mujeres ha sufrido violencia económica, una forma de maltrato que incluye: impedir trabajar o estudiar; controlar el dinero; usar tarjetas a su nombre sin permiso; o no pagar facturas conjuntas sin informar. Entre las mujeres con hijos, el 11 % afirma que su expareja dejó de pagar la pensión alimenticia al menos una vez.
Los datos también revelan que cuando los hombres toman en solitario las decisiones económicas del hogar, el riesgo de violencia se multiplica por cinco: en esas circunstancias ha sufrido violencia el 38,5 % de las mujeres.
Ruptura de la relación y menores expuestos
El 67,7 % de las mujeres víctimas de violencia por parte de parejas anteriores terminó la relación como consecuencia del maltrato; entre las mayores de 75 años, ese porcentaje desciende a un 26 %. El estudio estima que entre 1,2 y 1,8 millones de menores viven en hogares donde la mujer está sufriendo violencia, lo que expone a los niños a situaciones de alto impacto emocional.
Siete de cada diez mujeres que han sufrido violencia dentro de la pareja aseguran que ocurrió más de una vez, y el 39,2 % la padeció durante más de cinco años.
Algo realmente escalofriante es que, A pesar de la magnitud del fenómeno, solo el 16,8 % de las víctimas ha denunciado. En las parejas actuales, tres de cada cuatro denuncias las presentó la propia víctima; en las parejas pasadas, el porcentaje asciende al 89,9 %.
Secuelas: físicas y psicológicas
Las consecuencias son profundas y duraderas. El 73,5 % de las víctimas de violencia física, sexual o emocional presenta secuelas psicológicas, cifra que asciende al 82,6 % entre quienes sufrieron violencia física o sexual. Asimismo, el 48,4 % ha tenido lesiones físicas. El 16,4 % de las mujeres con discapacidad declara que esta se debe a la violencia sufrida por parte de su pareja.
Los datos también muestran un impacto grave en la salud mental: la probabilidad de haber tenido intentos de suicidio es 11 veces mayor entre las mujeres que han sufrido violencia física o sexual que entre aquellas que no la han padecido.
Esta macroencuesta confirma que la violencia contra las mujeres sigue siendo un problema estructural en España. El iceberg de la violencia machista es mucho más grande que el número de los asesinatos, el cual ya es abrumador. Debajo, como revelan los datos, hay millones de historias marcadas por el control, la agresión, el miedo y el silencio.
