Acertar con el gusto de las tronistas es complicado, y más todavía cuando son chicas tan exigentes como las que ocupan actualmente el trono. Suelen tener un estereotipo, pero no siempre se rigen por él para seleccionar a sus pretendientes: o no les gusta ninguno, o les gusta el mismo.

Y eso es lo que ocurrió con la entrada de Sergio, que llegó para conquistar a Niki, pero llamó la atención de Sonia, que desde el primer momento le quiso dejar claro que si se quería cambiar a su bando ella dejaba las puertas abiertas.

De todos modos, aunque él no para de repetir que se queda conquistando a Niki, siempre pone una coletilla final que ha sembrado mucha polémica: "de momento". Además, para más enredo, a la hora de opinar, hay una conexión especial entre Sergio y Sonia, que tienen puntos de vista muy similares, y caracteres muy compatibles.

A pesar de todo esto, y por respeto a Niki, su compañera de trono procura dejar claro en todo momento que "si a ella le gusta de verdad no me voy a meter". Aunque también quiso aclararle que tal vez, cuando él se decida a cambiar de bando, ella ya no le acepta, aunque no lo dijese del todo convencida.

Sergio no ha negado en ningún momento que la de Barcelona le atraiga físicamente, y ha afirmado que lo que le gusta de ella es que tiene mucho carácter, y mucha personalidad. Y esa es precisamente la baza que juega en contra de la polaca: su debilidad.

El pretendiente ya criticó en el anterior programa que Nicol se mostrase insegura, que se dejase mucho llevar por las opiniones de los demás, incluso llegó a insinuar que no tenía personalidad, un dato que le echa para atrás, y que a la tronista le ha dado qué pensar.

Ella está demostrando que, como suele ocurrir, cuanto más complicado es un chico más ganas tiene de conseguirlo. Por otra parte, el hecho de que Niki haya reconocido que cuando tiene pareja le gusta tener a su chico controlado, y le llama cada dos por tres es algo que su pretendiente ha explicado que le desencanta.

Sin embargo, el hecho de que todo el mundo dé por supuesto que Sergio estaría más a gusto en el bando de Sonia no ayuda a la polaca a recuperar la confianza en sí misma que, a pesar de que tenga a su pretendiente sin dejar de repetirle que "de momento" no se va a mover de allí, es consciente de que él está en una situación ventajosa porque el día que él quiera se puede cambiar de asiento.

Sonia ha querido dejar claro que al ver a Niki tan ilusionada tras su cita le repitió, para tranquilizarla: "No te rayes, porque si realmente a ti te gusta no me voy a meter. Yo tengo a mis pretendientes. Si me gustara muchísimo sí que lo diría, pero el chico me parece interesante, aunque me voy a mantener al margen".

Pero Virginia, ha querido recordar la rivalidad que existió en su día entre Niki y Sonia, en su lucha por Fabián, en la que la morena salió vencedora, podría estar incomodando a la polaca ya que "a la larga sabe que Sonia va a salir otra vez triunfando". "Te contradices un montón, y te encanta hacerte de rogar para estar en boca de los dos. Cada vez que dices 'de momento' dejas la puerta abierta en tu propio beneficio", le ha dicho a Sergio, a modo de crítica.

Algo que no le ha sentado nada bien al pretendiente, que ha sacado su carácter, para defenderse, y aclarar que no está jugando a dos bandas. Pero lo que realmente le ha activado ha sido la pregunta de Virginia: "¿Por qué sigues pretendiendo a una tronista que ya sabes que tiene cosas que no te gustan, si podrías estar conquistando a la otra, que reúne todas las características que buscas en una mujer?".

"Yo sé que tiene carácter, pero se siente cohibida al estar con la gente, porque en las citas sí que me muestra la parte que a mí me gusta" , ha contestado un Sergio muy nervioso. Pero Niki, que sigue confiando en que puede llegar a ganarse el corazón de su pretendiente, le ha dado un abrazo tranquilizador.

¿Terminará Sergio cambiándose al bando de Sonia, o seguirá siendo fiel a su actual tronista?