Ni Ruth, ni Iván, nadie ha tenido la culpa de que entre ellos haya surgido un amor que no han sabido controlar y que les ha llevado a mentir y a saltarse todas las normas con el único objetivo que tiene nuestro programa: encontrar el amor. Ruth e Iván se han declarado su amor, se han reprochado muchísimas cosas y han visto como el trono de Iván saltaba por los aires por haber querido jugar a dos cosas que son incompatibles.