
1 de 7
No han hecho falta ni los besos. Oriana se ha propuesto reconquistar a Tony y lo está haciendo tranquila, pero sin perder ninguna oportunidad. La pretendienta, mucho más relajada, ha desplegado sus armas de seducción y éstas parecen haber funcionado porque, tras el encuentro, Tony ha confesado que tenía ganas de besarla.






