Todo el mundo sabía que Marina era la nueva tronista y aun así, se han quedado asombrados cuando la han visto entrar el plató. Marina ha entrado cantando una versión muy personal del clásico ‘A mi manera’ y ha robado el corazón a los presentes. David Morales ha sido el primero en darle la bienvenida y bajar a bailar con ella.

Los nervios le han entrado nada más sentarse al trono, dónde ha prometido que iba a ser sincera con todos, pero sobre todo con ella misma. También ha querido aclarar, con ayuda de Miriam, que no le gusta el perfil de pretendiente que suele ir al programa, sino que le gustan los chicos un poco más pijos.

Antes de comenzar a conocer a sus primeros pretendientes, Emma ha querido darle una sorpresa y a la cabeza de todos ha venido un nombre: José Luis. Marina estaba decidida a recibir a su “ex marido” para zanjar el tema de una vez por todas y poder comenzar una nueva etapa en el programa. Pero, la sorpresa era agradable y la persona que ha entrado ha sido su madre.

Contenta por el nuevo camino que estaba empezando su hija y por volver a verla sonreír, la madre de Marina ha querido enfrentarse por última vez a la historia de Marina y José Luis. Madre e hija han contado que lo habían pasado muy mal con esta historia y que estaban deseando “pasar página”. Y es que, ellas han asegurado que no habían pedido nada y que todas las promesas que habían recibido habían sido gratuitas. Marina ha sido clara: “No quiero más promesas, quiero hechos”, al igual que su madre quien ha deseado lo mejor a José Luis, porque todo el mundo tiene derecho a ser feliz haya hecho, lo que haya hecho.

Llegaba la hora de conocer a los pretendientes. Primero ha sido el turno de Miguel, un joven que había sido Míster Marbella y que ha causado muy buena impresión en madre e hija. Luego han entrado Adrián y Manu, dos chicos que no han terminado de llenar a Marina por su forma de vestir pero que se han ganado una oportunidad.

David Morales, no ha dudado en bromear sobre el tema, y ha querido enseñar a los chicos como viste un hombre de verdad. Los pretendientes no se han atrevido a replicarle, pero Marina sí. “¿Quieres bajar a conquistarme?”, le ha preguntado a Marina dejándole sin palabras. Tras unos segundos de silencio, David ha salido del paso asegurando que ya lo había intentado y que no le sentara mal, pero él era demasiado para ella. Todo en tono de broma.

Siguiendo con el tema del estilismo, los pretendientes de Mamen han increpado al gancho y Pipi ha zanjado el tema. Marisa, la voz de la experiencia, ha alabado la forma de vestir del asesor, y éste se ha prestado voluntario para asesorar a los chicos. Pipi es el nuevo estilista del amor.

Marina había prometido ser sincera, y así lo ha hecho cuando ha entrado Rubén. Un joven muy bien vestido que no le ha gustado físicamente y ha decidido no dejarle sentarse por pena.