Las caras de los tres protagonista de este triángulo amoroso, hacían intuir que hago iba a pasar. Pero antes Emma quiso que viéramos como terminaron las cosas en el programa anterior. José Luis quiso ser sincero y se dejó llevar pidiéndole una cita especial a Nadia. La pretendienta le contestó que estaría encantada de tener una cita intima con él pero que no iba a ser en un jacuzzi y que no iba a ser ella la que la preparara. José Luis, un poco impactado por la actitud de la pretendienta, se mostró encantado de prepararla él. Sin embargo, la situación no era la adecuada.

Si en el programa anterior habíamos visto como Nadia rompía a llorar con su madre en plató, en esta ocasión cambiaban las tornas y era Marina la que se derrumbaba al ver como su tronista pedía un mayor acercamiento a su rival en el amor. El mallorquín no sabía muy bien como actuar porque su última intención es hacer daño a las chicas y mucho menos delante de sus madres. La madre de Marina, habló con el tronista y le dijo que aunque le entendía perfectamente y sabía que estaba en una situación complicada, que por favor no hiciera daño a su hija.

Esa misma tarde, José Luis tuvo cita con sus dos preferidas y algo notó el corazón de Marina que la llevó a preguntarle a Nadia si había habido beso en su cita. Ella estaba muy ilusionada y con la cabeza llena de ideas para sorprender a su tronista pero algo le decía que la cosa no pintaba bien. Al encontrarse con una respuesta afirmativa de Nadia, se hundió tanto que asegura haber estado todo el día llorando.

Marina no entiende cómo José Luis ha sido capaz de besar a Nadia tan sólo cinco minutos después de besarla a ella: “No sé cómo eres tan frívolo, no tienes sentimientos”, asegura. Y mucho menos entiende que Nadia haya conseguido un beso en tan solo tres citas y que a ella con ocho le siga pidiendo que le demuestre más. La pretendienta estaba rota de dolor y dispuesta a defender su dignidad como mujer.

La pretendienta ha conseguido dejar a todo el mundo sin palabras al poner a José Luis contra las cuerdas. Ella está haciendo un gran esfuerzo estando en el programa en contra de su familia y superando su timidez como para permitir que el tronista le humille de esa manera. Marina no puede soportar que José Luis se bese con Nadia. El tronista le ha pedido que se pusiera en su lugar y que por favor no abandonara porque estaba a punto de tomar una decisión. Algo que Marina no terminaba de entender. Ella no se ponía en su situación porque él no se ponía en el suyo y ha llegado a pedirle que si lo tenía tan claro que se fuera con ella del programa.

José Luis no sabía dónde meterse y mucho menos como actuar. Solo ha sabido pedir perdón y asegurar que no se iba a volver a besar ni con Nadia ni con nadie hasta que no tomara una decisión. Marina parecía convencida y dispuesta a seguir luchando porque lo último que quería era verse obligada a abandonar sin embargo, Nadia no era capaz de levantar la vista del suelo.

Emma le ha pedido que hiciera un esfuerzo y la pretendienta ha asegurado que tiene la sensación de que el tronista la estaba utilizando para ver si realmente le gustaba Marina o no. La cosa tampoco era así, José Luis estaba entre la espada y la pared. Si hacía caso a una, la otra se enfadaba y viceversa.

Si una cosa está clara, es que José Luis tiene mucha suerte de tener a dos chicas que tienen sentimientos verdaderos hacía él.