Manu y Susana rompen el hielo que les separaba, en la cabaña del amor

Manu y Susana dieron un paseo bastante frío antes de entrar a su esperada cabaña. Manu no ha dudado en explicarle a Susana que tenía la sensación de que esquivaba sus miradas en plató y ella le ha reconocido que le daba bastante vergüenza mirarle después de lo que pasó entre ellos. Susana es consciente de que su regreso al programa no ha sentado bien y que tiene mucha competencia para conseguir el amor de Manu, pero también que hay muchas cosas en la vida que no gustan y que ella está dispuesta a luchar hasta el final. El paseo ha sido un tanto serio, pero Susana estaba feliz de volver a entrar en la cabaña dónde todo terminó entre ellos y con ganas de que el tronista vaya a visitarle a Alcoy. Nada más entrar en la cabaña del amor, Manu y Susana se han acordado del movidón que tuvieron la última vez que estuvieran solos en ese mismo lugar. Susana le ha prometido a Manu que iba a ser sincera con él, pero Manu no parecía muy convencido porque la última vez le dijo lo mismo y al cabo de un rato le sacó que se había saltado las normas. Susana nota a Manu muy distante, pero es consciente de que no puede volver y besar el cielo de golpe. Aunque los jóvenes parecían tranquilos, el ambiente no era el mismo que cuando tenían sus antiguas citas y Susana le ha pedido a las cámaras que se marcharan para poder volver a recuperar a "su Manuel". Manu y Susana estaban deseando quedarse a solas en la cabaña que tan malos recuerdos les traía a ambos, pero tras un ratito sin cámaras volvió a fluir entre ellos la química que perdieron hace cuatro meses en ese mismo lugar. Manu no puede asegurar que Susana haya recuperado su posición, pero sí que sigue estando muy presente en su corazón. El tronista necesita volver a ver a la chica espontánea y natural que le robó el corazón, y está dispuesto a darle una nueva oportunidad. Con las cámaras apagadas, Manu y Susana volvieron a sentirse muy cerca el uno del otro y a recuperar parte de la confianza que tenían.