Con muchísima seguridad y con el sentimiento de ser una tronista en toda regla, Jéssica se ha sentado en el trono y ha hecho flipar a la presentadora en el primer minuto. La pretendienta VIP nos ha contado que estaba bien, que Iván le seguía gustado, pero que su historia de amor no iba a ser posible y ha calificado a sus compañeras de "pechugonas". Una contestación que nadie esperaba y que ha dejado claro que entre ellas no va a surgir una amistad para toda la vida. Jessica no se ha querido mojar, pero sí nos ha contado que busca a un chico alto, con carácter y preferiblemente moreno.