Aunque Iván se ha puesto en pie y se ha acercado a Rocío para repetirle en multitud de ocasiones que lo sentía, que se había equivocado y que lo había hecho todo muy mal, Rocío necesitaba algo más y le ha exigido al tronista que por una vez dejara de pensar únicamente en él porque ella había dejado muchas cosas por estar a su lado. La situación se ha ido tensando por momentos y al ver a un Iván que se escudaba en el miedo a que Ruth lo contara todo para no haberla dicho la verdad, Rocío ha comenzado a soltarle informaciones de los bolos que le habían llegado e Iván ha estallado. El tronista asegura sentirse muy presionado y culpable de toda la situación e incapaz de decir algo más de lo que ya estaba contando. En ese momento, su amigo Suso, le ha aconsejado que se olvidara de las reglas y que contara únicamente lo que sentía. Iván quería estar con Ruth, pero al mismo tiempo no le gustaba la mujer que estaba conociendo.