Cristian ha asegurado tener este tema olvidado y superado. Parece no haber vuelta atrás y pese a todo, no quiere hacerle daño a Anabel y no le guarda ningún rencor. Por eso, nada más verla en los pasillos ha hecho por saludarla en dos ocasiones y ella le ha negado el saludo, algo que ha sorprendido al extronista. Pero todo tenía una explicación. Según Anabel, no ha sido por falta de ganas, sino que todavía sigue enamorada de él y es incapaz de mirarle a los ojos sin romperse. Tras verla con lágrimas en los ojos y después de que volviese a reconocer su gran error, Cristian ha intentado tranquilizarla: "No te culpo, ni te voy a hacer una cruz para toda tu vida". Además ha aprovechado para zanjar esta historia para siempre. Y es que a pesar de haberla elegido en su final, el extronista ha reconocido que no estaba seguro de que su relación fuese a llegar a buen puerto y el descubrir la historia de Rubén le había terminado de frenar por completo. Pero Anabel tiene otra teoría, piensa que Cristian se ha aferrado a su desliz para utilizarlo como excusa y separarse de ella, un motivo por el cual el extronista habría puesto tanto interés en hacer pública toda la información de la infidelidad y en lugar de hablar las cosas en casa como todas las parejas.