Iván había preparado una increíble cena romántica para Ana y, aunque parecía que iban a pasar un buen rato, Ana no ha dudado en dejarle las cosas claras a su pretendiente y le ha dicho que había comportamientos suyos que no le gustaban nada. Tras hablar un poco del resto de pretendientes y sobre cómo estaba avanzando su relación, Iván ha aprovechado para darle un regalo a su tronista. A Ana le ha encantado el detalle que ha tenido Iván, pero aún así, la tronista se ha ido con un mal sabor de boca porque ni si quiera le había salido darle un beso y ha confesado que la cita le había servido para aclarar sus dudas.