Labrador ha empezado el programa con las cosas muy claras. No le gustó que Ana le mintiese y mucho menos que le comunicase su intención de irse y, aunque triste, ha dejado claro no pedía pedirse que se quedase en su trono. "No sé qué decir, ha pasado mucho tiempo y le tengo mucho cariño, pero no sé. Siento por ella, pero me he llevado una desilusión porque no es lo que esperaba y temo que no pueda llevar una relación seria. Si yo me fuera con ella a día de hoy, creo que tendríamos movidas a diario. No sé si es la diferencia de edad, sus inseguridades... pero ella no está tranquila conmigo", ha sentenciado algo frío pero seguro.