Dame una pista refresca las tardes de Cuatro

cuatro.com 06/07/2010 09:50

La diversión y los retos de ingenio a contrarreloj ha llegado a las tardes de Cuatro. La presentadora Luján Argüelles se pone al frente de Dame una pista, la adaptación, producida por Grundy, del formato británico Give us a clue, que ha permanecido en antena en Reino Unido durante décadas e incluso ha pasado por la prestigiosa BBC.

Dos equipos se enfrentan en retos de mímica y juegos de palabras. Estos equipos están compuestos por cinco miembros con una relación muy estrecha entre ellos: amigos, familiares, compañeros de trabajo, etc. Y tienen por objetivo del grupo es adivinar la palabra o expresión a través de juegos de palabras y mímica.

En Dame una pista vale casi todo, sólo hay que tener cuidado en repetir las palabras que ya te han dicho y tener cuidado con la raíz de cada palabra.

El programa se divide en dos fases, en la primera los dos equipos se enfrentan entre sí. En la segunda fase, el equipo que resulta ganador se enfrenta a los ganadores del programa anterior. Y dentro de estas dos fases hay cinco pruebas:

Pasa la pista: cada miembro debe adivinar un concepto definido por un compañero de equipo, y después, explicarlo con otras palabras al siguiente miembro del grupo.

Las cuatro pistas: Cada una de las pistas que da nombre a la prueba se refiere a un concepto que un miembro del equipo debe explicar, mediante mímica y a contrarreloj, a sus compañeros.

El panel: ahora, es sólo un miembro del equipo el encargado de adivinar las palabras que escenifican por turnos sus compañeros, y que pertenece a la categoría que previamente han elegido.

La lista: Es la repesca, la oportunidad que tiene el equipo perdedor de volver a Dame un pista. Cuatro miembros del equipo deben adivinar las palabras que el capitán ha pensado a partir de un concepto dado por Luján.

10 para el bote:el objetivo es adivinar, a través de la mímica, 10 palabras en 90 segundos. Primero uno interpreta y el resto de los miembros del equipo aciertan, pero sólo es válido cuando dice la palabra el capitán.

Cada vez que aciertan una de ellas, tienen la oportunidad de plantarse o seguir concursando. Con cada nueva palabra, uno de ellos pasa al lado de los intérpretes, de modo que, si llegan a la última, el capitán es el único responsable de adivinar la palabra que escenifiquen sus cuatro compañeros, y que les puede brindar la victoria absoluta.

A partir de aquí, lo importante es la rapidez mental y el ingenio. Las confusiones se mezclan con los nervios del contrarreloj, saliendo definiciones realmente curiosas y divertidas.