Cristo está preparado para triunfar en el mundo de la moda. Debido al estrés que va a sufrir dentro de unos meses debido al lanzamiento de su línea de ropa, ha decidido darse un capricho y ha acudido a un centro de estética. Mientras se encontraba dándose un baño relajante en un jacuzzi, ha recibido dos peces y una carta de su admirador secreto y Cristo ha confesado: “Esto ya es un admirador en serie”.