“Desde hoy tenemos un juicio absolutamente nulo”, decía Elpidio José Silva. El magistrado, acusado de delitos como prevaricación aseguraba que tras la renuncia de su abogado y la orden del magistrado de continuar con el juicio nos encontramos “ante una situación de nulidad manifiesta del proceso” y añadía: “Cualquier sentencia que se dicte, incluso desgraciadamente una sentencia absolutoria, que es la que irremediablemente aquí se debe dictar, desde el día de hoy es nula”.
Durante el receso, el magistrado no ha podido salir y ha hablado con su abogado en la sala: “Lo que ha sucedido hoy habría que estudiarlo muy detalladamente”, decía, “no se ha permitido la intimidad adecuada para poder dialogar entre mi abogado y yo”. Silva explicaba que han tenido dificultades para estar solos y añadía que su abogado ha sido llamado “para ampararle el colegio de abogados de Madrid”.
“Si yo digo que no tengo un abogado y el abogado está renunciando ¿en qué cabeza cabe? No se puede operar en un basurero”, continuaba diciendo Silva que, ante las preguntas de Isabel San Sebastián aseguraba que quiere continuar con el proceso pero matizaba: “En estas condiciones no tenemos proceso, lo que queremos es un proceso limpio para poder defendernos”.
En cuanto al escrito de acusación del fiscal, Silva lo calificaba como “una sarta de falsedades” sin fundamento y decía: “No porque se expresen muchas irregularidades en ese escrito que no tienen ningún fundamento pueden ser ciertas”.
Silva concluía que tras lo sucedido en la sala “no hay proceso, todo es una pérdida de tiempo” pero evitaba hablar de lo que hará a partir de ahora: “Hasta que no lo estudiemos no lo podemos saber, es un hecho insólito y lo que tenemos es una nulidad como una casa, hay que parar el proceso”.
"Mi abogado renuncia a mi defensa como un cirujano no operaría en un estercolero"
Antes de que su abogado renunciara a su defensa en el juicio, un equipo de 'Las Mañanas de Cuatro' acompañaba a Elpidio José Silva hasta el juicio. En estas declaraciones exclusivas, el magistrado decía: "Mi abogado renuncia a mi defensa en las mismas condiciones en que un cirujano no operaría a nadie en un estercolero, no se dan las condiciones de juego limpio, de juicio justo y de garantías mínimas".