Una soltera se lanza a los brazos de Carlos Sobera en ‘First Dates’: “Estoy enamorada de ti”

  • Matías pide a Carlos Sobera que cena con Isabel: “Tengo a un hombre perfecto para ella”

  • Carlos Sobera, ante el cariño y la simpatía de la soltera: “Eres más maja que las pesetas”

  • Isabel y Pepe ya saben cómo será su segunda cita juntos: “Quiero invitarte a una buena mariscada”

Carantoñas, piropos y hasta una declaración de amor. Isabel ha llegado a ‘First Dates’ dispuesta a encontrar el amor y ha caído rendida ante los encantos de Carlos Sobera. Asegura llevar años enamorada del presentador y no ha dudado en aprovechar el momento. Sobera le ha seguido el rollo y entre arrumaco y arrumaco, le ha dicho “eres más maja que las pesetas”.

Isabel estaba encantada y le ha pedido a Matías que les hiciera una foto juntos, y este le ha pedido a Carlos Sobera que cenara con ella, pero el presentador le ha explicado que tenía a un hombre maravilloso preparado para conocerla. Isabel asegura que a ella no le faltan hombres y que ahora tenía a un pretendiente francés que se había comprado una casa en Francia para que se fuera con él, pero que le había dicho que no.

Sin perder la alegría y con mucho cachondeo, le ha contado al presentador que le gustan los hombres altos y elegantes, y que le gustan con el traje de flamenco puesto “esos pantaloncitos tan estrechos y los tirantes”. Al saber que su cita se llamaba Pepe, la soltera se ha venido arriba y ha cantado un “Pepe, Pepe, Pepe”.

Pepe ha entrado entre ovaciones y se ha quedado un poco parado, pero ha sentido que Isabel era una mujer con clase. Ella le ha contado que tiene una casa enfrente de la playa, que es una mujer afortunada y que sus joyas son buenas “los anillos y esta gargantilla que me compré en el Corte Inglés”.

Ya sentados a la mesa, Pepe ha querido saber si a Isabel le gustaba viajar y bailar, y ella le ha contado que acababa de hacer un crucero maravilloso en el que tuvo que dejar a su pareja porque se puso muy celoso de que ella bailara cuatro o cinco piezas con el capitán. Él ha estado haciendo el Camino de Santiago por tercera vez, pero a ella eso de dormir en albergues no le gusta demasiado “está lleno de piojos y yo que sé… qué asco”.

Pepe tenía la sensación de que era una rubia platino muy pintada, pero ella le ha dicho que además era “peligrosa” y él ha sentido que era una mujer muy guay, más allá de su aspecto. El soltero le ha contado que le gustaba mucho la bicicleta y practicar senderismo, pero que también le gustaba mucho la cerveza y la fiesta.

En el amor, Isabel asegura ser una mujer ardiente y juguetona, le gusta hacer disfrutar a su pareja y pasar momentos divertidos incluso, le ha confesado a Pepe que le encanta disfrazarse. A él le ha parecido que eran muy parecidos y que juntos se lo podían pasar muy bien porque él cuando está a gusto con alguien también lo da todo.

En el reservado, a Isabel y a Pepe se les han resistido las Bolas del Amor, pero al final han terminado encontrando el punto intermedio entre un pico y un morreo. Ella le ha dado cinco piquitos que a él le han encantado. Hacía mucho que Pepe no se reía tanto con una mujer y no ha dudado en decirle que quería repetir. Ella también le ha aclarado que no se pusiera celoso de Carlos Sobera porque él le había encantado y que estaba deseando que fuera a verla a Blanes para invitarle a una mariscada.