Una pequeña de tres años permaneció el lunes sola abandonada durante siete horas en un autobús escolar, en Sitges (Barcelona). El autobús llegó a las nueve de la mañana a su destino y la menor se quedó dentro sin que nadie se percatase.
Hasta las cuatro de la tarde, cuando el autobús hizo el viaje de regreso, nadie cayó en la cuenta de que estaba allí. No la vio ni el conductor, ni las dos monitoras que acompañan el recorrido ni ninguno de los 61 alumnos que iban con ella en el viaje.
El autocar iba a empezar el turno de la tarde, el de regreso a casa, cuando un trabajador de la empresa vio que la niña estaba dentro del vehículo. Llevaba su almuerzo y la botella de agua y por fortuna, y a diferencia de los días anteriores, el lunes no hizo tanto calor en la costa barcelonesa.
'En boca de todos' ha hablado con la madre de esta pequeña, que ya ha interpuesto una denuncia. Según ha contado, la pediatra de la niña ha destacado la suerte que ha tenido por la bajada de las temperaturas y haber sabido administrarse el agua que llevaba, ya que de no haberlo hecho "habría fallecido".
Según nos ha contado la madre, la niña cuenta lo mal que lo pasó, que estuvo todo el día sola sin que nadie escuchase sus gritos y que hasta "intentó conducir el autobús".