La intención del Ayuntamiento de Vic (Barcelona) de no permitir el empadronamiento de inmigrantes en situación irregular no cesa de crear polémica, y llega incluso a dividir los partidos implicados en la votación.
Un grupo de militantes de ERC de Vic se ha desmarcado este martes de la postura de su partido en el ayuntamiento de esta localidad y ha hecho pública una declaración en la que critica la medida que pretende evitar el empadronamiento de los inmigrantes en situación irregular.
Según el portavoz de este grupo, cerca de un 20 por ciento de la militancia de ERC en Vic apoya esta declaración y es contraria a la posición del Ayuntamiento, gobernado por una coalición de CiU, PSC y ERC.
"Estamos en contra de cualquier medida del consistorio de Vic que impida a los inmigrantes cumplir con su obligación de empadronarse, les relegue a la inexistencia legal y les impida recibir asistencia sanitaria, ayudas sociales y escolarizar a sus hijos, condenándolos a enfermar y al analfabetismo", señala la declaración.
El PSC también se fractura
Por su parte, los cuatro concejales que el PSC tiene en el Ayuntamiento de Vic (Barcelona) siguen apoyando la propuesta hecha por el Gobierno municipal de exigir los papeles en regla a los inmigrantes que quieran empadronarse en la localidad, después de que el viceprimer secretario del PSC, Miquel Iceta, les instara a oponerse a los nuevos criterios.
Según confirmó el segundo teniente de alcalde y portavoz del PSC en el Ayuntamiento, Josep Burgaya, el equipo de gobierno municipal en su totalidad y los ediles socialistas en particular serán "absolutamente escrupulosos" en el respeto de la legalidad vigente.