En la fotografía, tomada el 15 de junio, se puede ver como los vientos Alisios, predominantes en la zona, golpean contra la cara noreste de la isla provocando oleaje en unas zonas de la isla y calma total en la cara opuesta. El juego del viento con la tierra rocosa y volcánica crea un efecto por el que, visto desde el cielo, parece que las islas navegan en el mar.
La fotografía compite con una imagen captada con infrarrojos de la fractura del mar de hielo en Alaska.
En el certamen, organizado por el Earth Observatory de la NASA, las imágenes compiten de dos en dos en varias rondas eliminatorias. La votación es popular y si la fotografía pasa esta ronda llegará a la gran final para convertirse en la foto del año.