El juez de Lleida ha denegado la petición de Fernando Blanco, acusado de estafar más de un millón de euros utilizando la enfermedad de su hija Nadia, que había pedido estar en un hotel con vigilancia policial mientras dure el proceso.
Blanco lleva en la cárcel de forma preventiva desde 2016. Él y su mujer se enfrantan a seis años de cárcel. Blanco fue detenido en un control policial cuando presuntamente iba a huir de España. En ese momento llevaba en su coche un arma.
La madre de Nadia, Marga, está en libertad con cargos. Vive en un pueblo de las Islas Baleares, cerca del municipio en el que reside la niña con su tía materna desde que en 2016 el juez les quitó la custodia.
La pareja estuvo años paseando a su hija Nadia, con una enfermedad rara, por platós de televisión y asociaciones y colegios, donde daban a conocer su historia para recaudar dinero para su supuesto tratamiento. Durante años lograron recaudar de personas anónimas y famosas, empresas e instituciones más de un millón de euros. Hoy el letrado de Blanco ha asegurado que su cliente ha intentado devolver el dinero. Sin embargo, dice que no ha podido porque la justicia le ha embargado las cuentas.