Tesla y sus cristales 'irrompibles': los mayores desastres de las empresas durante una presentación

Hacer una presentación en directo de un producto puede ser un gran éxito, o un auténtico desastre para una compañía. Esta semana lo hemos visto con Tesla y su flamante nuevo coche que, teóricamente, tenía unos cristales irrompibles. Pero no es la primera vez que una de estas presentaciones, acaba en absoluto fiasco.

Entrada triunfal de tu nueva ciber-furgoneta, directa desde el futuro, con señores de negro incluidos... Toca demostrar que sus cristales son irrompibles. Así que, bola de acero en mano, fracaso. Y nuevo fracaso al segundo intento. Fallo estrepitoso y en directo para Tesla que se suma a una larga lista.

Volvo y sus sistemas de frenado inteligente son ya todo un clásico del desastre, atropellando hasta a su director. Ellos también son un clásico, los robots, que se van de varillas. Porque una cosa es el ensayo, como el de las gafas virtuales de Microsoft hace unos días, aparcando incluso en Marte. Y otra es la realidad. Que no sale nada y te terminas retirando del escenario. O si sale, pues lanzan el anuncio sin el fondo de batalla que justifique los tiros.

Disimular

Y qué me dicen cuando en plena presentación, se cae el 'prompter', y sin texto es incapaz de continuar. Y sí. Al creador de Apple le falló la conexión a Internet de su nuevo Iphone, y unas cuantas veces. También a Microsoft, con atasco en su tableta, o pantalla azul de la muerte.

Meteduras de pata tecnológicas hasta en los Juegos de Invierno: así deberían haber sido los anillos olímpicos, pero uno se resistió. Así que tocó disimular hasta con los círculos en el suelo.

En Portugal, su primer dron militar quedó en avión de papel. Y terminamos con bochorno patrio: Expo92 de Sevilla. Botadura de la réplica de la Nao Victoria. A bordo, Curro, la mascota oficial que, al volcarse, estuvo a punto de morir ahogado.