La joven tan solo tenía 29 años. Su pareja, también natural de Alcoy, Alicante, con la que mantenía un año de relación y con quien tenía un bebé de 4 meses en común, dijo habérsela encontrado muerta, degollada en su casa de campo en Planes, Alicante, tras haberse despertado sobresaltado por el llanto de su hijo.
Desde entonces, el día 9 de febrero, las autoridades comenzaron a trabajar sin descartar ninguna hipótesis, pese a que los primeros indicios señalaban a un posible suicidio.
Hoy, la autopsia ha revelado que las heridas que presentaba la víctima son incompatibles con el suicidio, por lo que se ha procedido al arresto de su pareja como principal sospechoso de un delito de homicicidio en el ámbito de violencia de género.
Tras los acontecimientos, se ha decretado el secreto de sumario.
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