David Serrano ha pedido perdón a los padres de Julen ante el juez, que ha aceptado el acuerdo in extremis al que han llegado las partes que consiste en el pago de 180.000 euros por partes. Primero 25.000 euros, que ha abonado uno de los clientes del bufete de abogados de la defensa de David, que también acepta la pena de un año de cárcel.
Las malas relaciones entre David y los padres de Julen parecen haber quedado atrás, pasando del rencor al olvido, en aras de no tener que repetir los malos momentos de un rescate que conmocionó a España. David ha reconocido que el acuerdo ha sido un alivio aunque "la condena la voy a llevar de por vida. Pero es un alivio muy grande. Fue un accidente, jamás he querido que a ese niño le pasara nada. Terminamos con esto. Buenos días".
David se ha mostrado molesto con un periodista al percibir que ponía en duda su arrepentimiento aunque ha pedido a todos que respeten estos momentos duros. Lo mismo ha solicitado el padre de Julen que ha dado las gracias a todos por el trato recibido.