Este martes comienza en Madrid el juicio contra Pablo Soto, el joven creador de varios programas P2P de intercambio de archivos como Blubster,Piolet y Manolito a través de su empresa MP2P Technologies y que ha conseguido hacer sombra a plataformas internacionales como eMule o Kazaa.
Este joven programador español, que fue denunciado hace un año tanto por Promusicae, la entidad que representa a las principales discográficas españolas, así como por otras discográficas (Sony, Universal, Emi y Warner), se enfrenta a la mayor demanda en España contra el creador de un programa de intercambio de archivos por Internet. Las discográficas le acusan de competencia desleal y piden 13 millones de euros por daños y perjuicios.
Los denunciantes consideran que, gracias al software creado por Soto, y su empresa y que es utilizado por más de 25 millones de personas, los usuarios han podido disfrutar gratuitamente de un gran número de canciones y eso supone un fuerte agravio para la industria.
No obstante, más allá de lo económico, este juicio plantea el debate de si el creador de una tecnología es responsable del uso que se haga de ella. Soto asegura que las discográficas van contra él porque legalmente no pueden ir contra los usuarios.