José Manuel Roás entiende perfectamente a Andrés Aberasturi cuando habla de la enfermedad de su hijo porque tiene un hijo con las mismas características: “Hablar de sufrimiento es una obviedad. El escándalo del sufrimiento de los inocentes… ¿quién no es capaz de entenderlo?” José Manuel y Andrés hablan y reflexionan sobre el sufrimiento: “Cuando me enteré dejé las oposiciones, fui un cobarde. Pensé que con eso yo no podía, que iba a ser imposible”.