El portero del PS Sakiet Eddaier, equipo de tercera división de Túnez, se convirtió en protagonista del partido tras una jugada difícil de creer. Tras un pase en profundidad a un jugador del equipo rival, el portero no dudó en salir del área para quitarle el balón.
Primero se jugó la roja la hacer una segada en el borde del área. Tras ganar el balón, hizo dos ruletas al más puro estilo Zidane ante dos jugadores rivales. No se quedó ahí sino que siguió avanzando hasta encontrarse con otro jugador rival y, aquí, ya sí, se la pasó a un compañero con el exterior de su bota derecha.
La jugada dejó atónitos tanto a sus compañeros de equipo, como a los jugadores rivales y a todo el público que ovacionó la meta. Sin duda, el joven portero controla, y muy bien, el juego de balón con los pies.