Análisis del Turtle Beach Recon Controller para Xbox y PC: un mando que suena muy bien

  • Un mando cargado de funciones de personalización y botones extra programables

  • Distintas ecualizaciones de audio y el modo Suporhuman Hearing de Turtle Beach en tu mando de juego

Turtle Beach es conocida mundialmente por sus auriculares de gaming, los que lleva perfeccionando y vendiendo como churros desde hace años. Pero ahora, la compañía ha lanzado un mando de juego, el Recon Controller, un mando con cable para Xbox X/S, Xbox One y PC. Y ha trasladado a este nuevo producto toda su experiencia y buen hacer en el mundo del audio.

El Recon Controller es un mando robusto y bien diseñado, muy parecido en sus formas y tacto con el mando oficial inalámbrico de Xbox Series X/S, pero con cable y unas útiles superficies rugosas en ambos agarres de las manos. Aunque es cierto que no se trata del mando más elegante del mercado, por la gran cantidad de botones que presenta en su parte superior (y de los que hablamos luego), no es demasiado estridente y resulta realmente cómodo.

Pero la gran baza del Recon Controller se descubre cuando le enchufamos unos auriculares en el puerto inferior de 3,5 mm. Es aquí cuando se activan los controles de audio del mando y las mejoras en este aspecto que encierra en su interior. Primero, podemos activar o desactivar el micro de nuestros auriculares con un cómodo botón en el mando, además de controlar el volumen del juego o del chat con botones muy cercanos a nuestros pulgares.

Pero las opciones de audio del Recon Controller van mucho más allá. Primero, podemos utilizan el modo ‘Monitor de micrófono’ que nos permitirá tener el retorno del audio de nuestro propio micro, con cuatro modos de intensidad que podemos ajustar para que no resulte molesto (también podemos desactivarlo). El modo Ecualización nos permite ajustar el audio que recibimos con cuatro cortes predeterminados: signature sound (la EQ predeterminada de Turtle Beach), potenciador de graves, potenciador de graves y agudos y vocal boost (que hace que predominen las voces).

Además de estos dos modos, el mando cuenta con un botón con el inconfundible logo de la tecnología ‘Superhuman Hearing’ de Turtle Beach. Cuando activamos este modo, potenciaremos esos sonidos de detalle que peuden pasar desapercibidos: “desde pisadas sigilosas hasta las recargas de los enemigos, nuestra configuración de sonido Superhuman Hearing te permite escuchar cada detalle para ofrecerte la ventaja de sonido definitiva” aseguran desde Turtle Beach.

Pero la personalización del mando no se limita a las opciones de audio. Con los iconos y botones de la parte superior también podemos acceder a otros dos modos: el modo mapping, con el que podemos configurar las acciones que realizarán los dos botones extra que el mando incluye en su parte inferior, para activar con los dedos corazón, y que podemos guardar en cuatro configuraciones distintas. Estos botones traseros se configuran sin necesidad de software, con una rutina un tanto compleja de aprender, pero que en seguida nos permitirá guardar nuestros cuatro perfiles.

Hay otro modo del mando que activa la función Pro-Aim, que puede limitar la acción del stick derecho o acelerarla, para que ajustemos el movimiento de la mirilla en los FPS a nuestro gusto. También permite cuatro configuraciones que aumentan o reducen su intensidad.

El mando cuenta con dos botones: ‘Mode’ y ‘Select’ que nos permiten activar los cuatro modos (monitor de micro, ecualización, perfiles de botones traseros y Pro-Aim) y elegir sus diferentes configuraciones. El sistema funciona bastante bien, pero como ya hemos dicho tiene una curva de aprendizaje algo elevada y es necesarios echarle un buen rato leyendo las instrucciones incluidas para dominarlo.

El Recon Controller es cómodo, robusto y nos encanta que cuente con tantos modos y opciones de personalización, sobre todo mejorando el audio cuando conectamos unas auriculares. El tacto rugoso de sus gatillos y de los botones traseros nos convence, aunque no demasiado su cruceta digital, uno de los puntos más flacos de este dispositivo (tiene un aspecto y tacto de pieza de plástico algo endeble).

En general estamos ante un mando que nos ha gustado por la cantidad de funciones que ofrece, pero también por su comodidad, con su cable con conexión USB-C de gran calidad, con 3 metros de longitud y recubierto de tela. El mando llega al mercado en dos colores: negro, ideal para Xbox Series X, y blanco, que va a juego con Xbox Series S. Y todo a un precio realmente bajo: 49 euros. Y es igualmente bueno si lo usas en tu PC.

El primer mando que lanza Turtle Beach ha resultado una extraordinaria sorpresa.