Análisis de Persona 5 Strikers: un último viaje por los viejos tiempos

La saga Persona esta alcanza unos altos dotes de popularidad y es bien merecida, pues ha regalado a los fans una buena cantidad de entregas de un divertido y único JRPG. Sólo hay que ver el éxito de todos sus lanzamientos, aunque se trata de revisiones que llegan para recuperar alguna de sus entregas pasadas, como el caso de Persona 4 Golden o Persona 5 Royal. Este último, una edición “definitiva” de la última entrega de la saga.

Y es precisamente del fabuloso Persona 5 del que deriva el juego que ahora nos llega, una especie de secuela del fabuloso JRPG que muchos colocan como el mejor del género para PS4. Pero, en este caso, no se trata de un título que mantenga ese género, sino de un extraño derivado que mezcla elementos de aquel con una especie de Musou. Una experiencia que nos devuelve al universo de Persona y que enamorará a los fans, pero que dista mucho de todo lo que ofrecía su predecesor.

Persona 5 fue todo un éxito en PS4 y es que su propuesta de JRPG por turnos con esa historia de grupo de adolescentes tan cautivadora convenció a millones de fans. A grandes rasgos, aquel juego nos metía en la historia protagonizada por un grupo de estudiantes japoneses cuyas vidas darán un giro de 180 grados al descubrir el Metaverso, un plano alternativo de la realidad en el que pueden acceder a la conciencia (materializada en forma de palacios) de aquellos humanos cuyas ambiciones o deseos oscuros han traspasado la barrera de lo “moralmente aceptable”.

A lo largo de la aventura RPG conoceremos a un gran número de personajes interesantes, algunos de los cuales entrarán a formar parte de nuestro grupo: los Ladrones Fantasma de Corazones. Tendremos que aprender a compaginar nuestra vida normal como estudiantes con el hecho de hacernos más y más famosos a través de nuestra identidad secreta. Elementos como las redes sociales, el acoso, la muerte y mucho más se tratan con maestría en este gigantesco y divertido JRPG.

Además de la reedición de esta entrega, los usuarios de PC han podido disfrutar de el remake de Persona 4 y aplacar sus ganas de nuevas aventuras con los Ladrones Fantasma. Por eso, la llegada de este Persona 5 Strikers ha sido recibida como agua de mayo, y sus ventas la primera semana dejan claro que había ganas, pero el título no es exactamente una nueva entrega de la saga (de ahí que repita el número 5 en su título) sino una especie de spin-off, que es cierto que actúa como secuela pero que no repite la fórmula, sino que ofrece otra experiencia distinta. Entramos en harina.

A nivel gráfico, sonoro y artístico, todo recuerda al fantástico JRPG del que nos enamoramos, pero no estamos ante un juego igual. La historia no es tan buena como aquella, claro, aunque esta no está mal si lo que quieres es revivir las conversaciones y los problemas cotidianos de este grupo de adolescentes, mientras deciden tomarse unas vacaciones para ponerse al día, y por los viejos tiempos. Ahora son universitarios y necesitan encontrarse de nuevo con su grupo de compañeros del instituto. Por eso algunos momentos de exploración y apra realizar algunas tareas secundarias recordarán poderosamente al JRPG orignla, pero ahasta aquí llegan las similitudes.

Porque aquí no encontrarás intrincadas y complejas mazmorras y profundos combates por turnos, sino un Musou donde hay que saltar y golpear al más puro estilo hack’n slash para repeler holeadas de enemigos. Al más puro estilo Dynasty Warriors, salvando las distancias, aquí hay que abrirse paso entre un ejército de enemigos tontos y sencillos de derribar, encadenando devastadores ataques y combos, para luego dar con un enemigo un poco más grande y duro de abatir que nos dará un poco más de trabajo. Aquí, para tener un ingrediente más propio de la saga Persona, podemos manejar a un escuadrón de hasta 4 Ladrones Fantasma e ir intercambiándolos en la batalla, para desplegar cada uno de sus ataques y habilidades únicas.

Por eso tienes que gestionar la salud de cada uno de los personajes, cada uno de sus ataques y demás para saber cuándo utilizarlos y cuándo dejarlos en el banquillo. Las habilidades, fortalezas y habilidades de los enemigos irán cambiando a medida que avancemos, por lo que iremos aprendiendo como enfrentarnos a ellos. Todos los combates se van desarrollando en una serie de Cárceles, que actúan como los Palacios de Persona 5. Cada una de ellas muestra un interesante enemigo final que es la sombra de un personaje en la vida real, y que nos proporcionará interesantes y divertidas recompensas si lo derrotamos.

Pero, entre cárcel y cárcel (las fases de Musou) hay que pasar por las fases de detectives en las que se mueven muy bien Joker y el resto de los Ladrones Fantasma. Aquí el juego nos mueve más allá de los límites de Tokyo y podremos visitar distintas ciudades, donde intentar averiguar por donde hacer avanzar la historia, pero donde también se pueden realizar tareas secundarias, degustar platos típicos, probar las atracciones locales… Y las largas conversaciones entre los personajes y sus pesquisas para descubrir dónde se ubica la nueva cárcel serán del gusto de los fans de Persona.

Persona 5 Strikers puede ser suficiente para una gran parte de los fans de la saga, ya que nos trae de vuelta a los mismos personajes y podemos aprender mucho más de sus relaciones y sus vidas. Pero la historia n o es tan apasionante ni profunda como la del RPG del que deriva y el juego, que ahora está dominado por un estilo de lucha Musou, es mucho menos elegante que el que disfrutamos en Persona 5. Los fanáticos de Persona lo disfrutarán pero hace falta una verdadera secuela con el número 6 en su título para que todo el sector de los videojuegos vuelva a rendirse a los pies de esta saga.