Análisis de Metroid Dread: el regreso triunfal de Samus Aran

  • Samus Aran regresa por todo lo alto en una aventura de 2.5 dimensiones de la mano de Mercury Steam

  • Se trata de la esperada continuación del mítico Metroid Fusion

Metroid Dread ya está en las tiendas. Uno de los juegos más esperados e importantes del año para Nintendo Switch ya puede comprarse a través de su tienda digital o bien en sendas ediciones físicas y Deluxe. Este lanzamiento además trae debajo del brazo un nuevo diseño de Nintendo Switch debajo del brazo, el modelo OLED, la cual trae mejoras como una pantalla mejorada, un dock con puerto LAN Ethernet y una capacidad interna mayor.

Si bien la llegada de Nintendo Switch OLED es algo secundario en cuanto al juego que nos atañe, hoy debemos hablar del quinto episodio de Metroid en 2D, con un buen hacer sobresaliente por parte de los españoles MercurySteam y sobre todo muchas horas de entretenimiento.

Debemos pararnos un momento y hacer mención especial a los padres de este retoño de la franquicia Metroid. MercurySteam, quienes ya estuvieron a cargo de algunos títulos de la franquicia Castlevania también realizaron el remake de Metroid II: Samus Returns para Nintendo 3DS. La saga protagonizada por Samus Aran no es algo nuevo para ellos y más si hablamos en una aventura protagonizada por esta en dos dimensiones. Han pasado poco más de cuatro años desde su debut con la saga y en este tiempo han estado trabajando duro en este proyecto, donde han tenido renda suelta en su desarrollo, aplicación de elementos jugables y dar carpetazo a varios flecos que quedaban sondeando en la historia.

De esta forma, nos encontramos con Metroid 5, tal y como fue mencionado en su tráiler de presentación. ¿Y por qué cinco?, ¿Metroid Prime no iba por la cuarta parte? Sí, toda la razón en cuanto a esta pregunta, pero en esta ocasión hablamos de la saga bidimensional que vio sus inicios en NES. Metroid, seguido de Metroid II: Samus Returns, Super Metroid y Metroid Fusion han sido los anteriores capítulos a este Metroid Dread, que llega a Nintendo Switch siguiendo la estela de sus antecesores. Intrincadas fases en dos dimensiones, visitar y revisitar zonas para acceder con nuevos objetos y emocionantes luchas contra jefes finales son algunos de los puntos que hacen de este un indispensable del catálogo de la consola híbrida.

Cazadora o presa

Su historia nos pone en el papel de la conocida Samus Aran, una de las cazarrecompensas más populares de la galaxia y que tiene tras de sí un amplio currículum de misiones cumplidaas. Tras exterminar por completo a todos los Metroid en el planeta SR388 y detener a los parásitos X, Samus es poseedora de algo muy poderoso, contar en su cuerpo con parte de ADN de Metroid, lo cual la hace inmune a los X. Estos seres son capaces de controlar e incluso replicar de forma perfecta muchas estructuras, algo que vimos en Metroid Fusion, por lo que en esta ocasión Samus partirá con ventaja.

Todo parece estar tranquilo hasta la llegada de unas misteriosas imágenes procedentes de un nuevo lugar, el planeta ZDR, donde se encuentra un ejemplar de parásito X vivo. La Federación Galáctica y Samus deberán de realizar una nueva misión conjunta en la que exterminar a estos seres y evitar que continúen propagándose.

Para aquellos curiosos que se pregunten sobre dónde ubicar Metroid Dread, este es una secuela de Metroid Fusion, siendo como mencionábamos anteriormente, el quinto capítulo de la franquicia bidimensional. En el Planeta ZDR se ocultan muchos secretos que atarán cabos sueltos de la franquicia, donde se sabrá más sobre la civilización de los Chozo, al igual que conocer nuevos y peligrosos enemigos. La presencia de los E.M.M.I es una de las amenazas reales a lo largo de la partida, siendo unas máquinas que fueron enviadas por la Federación Galáctica para rastrear este lugar y que de repente han comenzado a comportarse de forma anómala y errática. Todo esto, junto a la presencia de enemigos que no pondrán las cosas sencillas en ningún momento de la aventura.

Metroid Dread, siendo un nuevo proyecto de los españoles MercurySteam, ha tomado prestados muchos elementos que ya pudimos ver en Metroid II: Samus Returns. La saga se caracterizó hasta la aparición de este estudio de ser juegos en 2D puros y duros, algo que cambió en Nintendo 3DS ofreciendo mecánicas 2.5D. Desde el primer minuto notaremos esto, teniendo que atravesar intrincados lugares dentro de ZDR y que en muchos momentos obligan a pasar de largo zonas que estarían a nuestro alcance y que se encuentran inaccesibles por algún motivo concreto. Por ejemplo, puertas que no son capaces de abrirse con el láser normal, lugares demasiado altos o simplemente bloqueados por un enemigo o elemento al que no podemos derrotar en ese momento. Este factor fomenta aún más la exploración y sobre todo la memoria dado que en ocasiones habrá que retroceder en los pasos para encontrar esa puerta que no pudo abrirse o llegar a un lugar más alto. En cierta medida es algo que el juego recompensa, no sólo continuando en la aventura y con más estancias, sino que en otros momentos se ocultarán power-ups y mejoras para Samus, aumentando la capacidad de su arsenal de armas o vitalidad.

Los E.M.M.I, la evolución de S-AX

Avanzar en estos escenarios no será un camino de rosas ya que dentro de este laberíntico planeta tenemos las peligrosas zonas E.M.M.I. Estas unidades robóticas fueron enviadas para investigar el planeta y por extrañas razones, que serán descubiertas con el paso de las horas en la aventura, han comenzado a tener comportamientos erráticos y agresivos. Estas son muy inteligentes, teniendo una inteligencia artificial notable y que seguirán a Samus con cualquier ruido o movimiento que se realice. Los E.M.M.I incorporan habilidades de todo tipo, desde inmovilizar hasta congelar, por lo que en ocasiones lo aconsejable será ser muy sigiloso o huir lo más rápido posible de esa zona sin ser descubierto. Si por el contrario se es localizado por uno de estos enemigos, bloquearán completamente la sala sin posibilidad de salir e incluso cazarte. En este momento, será prácticamente imposible sobrevivir, salvo en ciertos momentos que será posible contraatacar su ataque ganando unos segundos vitales para escapar.

Samus Aran llega totalmente equipada al inicio del juego y cuyas habilidades perderá al inicio de la aventura, algo clásico en los títulos de la franquicia. Su armamento se compone de una gran cantidad de elementos como su láser, el cual puede ser mejorado hasta lanzar tres rayos al mismo tiempo o la capacidad de cargarlo durante unos segundos. Los misiles tampoco faltan, con versiones mejoradas capaz de congelar al enemigo, la morfoesfera con la que atravesar zonas muy estrechas, la capacidad de escalar, correr o realizar saltos a una gran distancia son algunas de las que están disponibles.

Estas son únicamente unas pocas de las que tenemos a disposición y que habrá que descubrir para avanzar en la aventura. Por ejemplo, en los primeros compases del juego hay zonas con las que únicamente es posible acceder con la morfoesfera, que se obtiene mucho después, por lo que en cierta medida el juego obliga a volver ahí a investigar. Esto es una buena forma de sentirse guiado además por la propia trama, lo que facilita en algunos casos evitar perderse o quedarse atascado en momentos concretos.

Jugabilidad clásica de nueva generación

Un clásico de Metroid son sus intrincados y laberínticos mapeados, algo que regresa con un mapa de grandes dimensiones y que investigar de cabo a rabo. Para hacer algo más fácil la tarea, MercurySteam ha pensado en aquellos jugadores más novatos e incluye un completo mapa con el que revisar los caminos, así como las puertas de cada estancia, ubicando de qué tipo es cada una, si se han abierto o el arma necesaria para abrirla siempre y cuando haya sido desbloqueada.

Por otra parte, es muy de agradecer que se marquen también las zonas E.M.M.I cuando se encuentren activas, lo cual evitará algún que otro susto. ZDR está compuesto de varias zonas tematizadas de una gran amplitud, recorriendo una zona repleta de lava, un bosque o un ambiente submarino entre otras y a las cuales se puede llegar de forma rápida gracias a un sistema de transporte que las une. Esta es una gran forma de atajar al mismo tiempo que descubrir lugares secretos.

Algo que tampoco falta en Metroid Dread son sus jefes finales, siendo todos y cada uno de ellos enemigos sorprendentes y con mecánicas de juego complicadas de predecir. Todos tienen un patrón distinto y descubrirlos no será algo relativamente fácil, por lo que supondrán en alguna que otra ocasión varios intentos para conseguir derrotarlos. Lo mismo podemos decir de los encuentros con jefes de zona, lo cual será frecuente en una parte del juego, y que obligará a ser preciso en tus movimientos para salir victorioso. Hemos de decir que los controles son de lo más precisos, sin ningún tipo de input lag en su control y reaccionando prácticamente al instante. Esto es algo muy de agradecer, sobre todo en las zonas donde los E.M.M.I campen a sus anchas y haya que correr y mucho. Tampoco faltan a su cita los puzles, siendo estos de una dificultad correctamente establecida y que no requieren de demasiado tiempo para resolverlos.

En materia técnica, Metroid Dread es un juego que ha sabido sacar partido a Nintendo Switch con un aspecto 2.5D que fusiona tanto elementos jugables como cinematográficos, teniendo secuencias de vídeo memorables y espectaculares. Al tratarse de un título de "dos dimensiones y media" tenemos fases de plataformas con una distribución realmente inteligente, con mucha lógica y que obligan a usar determinadas habilidades. Los fondos se encuentran completamente vivos, estando frecuentemente en movimiento con enemigos que se moverán, estructuras cayendo o elementos que captan la atención. Las animaciones tanto de Samus como de los enemigos han sido sobresalientemente logradas, de gran realismo. Los diseños de los enemigos también son endiabladamente realistas con terroríficas formas alienígenas. Cerramos sus aspectos técnicos destacando unos sobresalientes efectos de luces y sombras, así como de partículas, siendo el broche de oro en lo visual.

Su banda sonora ha sido compuesta por Soshi Abe y Sayako Doi. El primero ha trabajado en títulos como The Legend of Zelda: Breath of the Wild y realizando arreglos para Super Smash. Bros Ultimate mientras que el segundo ha participado en Super Mario Maker 2 y Animal Crossing: New Horizons. Dos compositores noveles en cuanto a videojuegos pero que han realizado un trabajo magnífico, trayendo temas icónicos tanto orquestados como con sintetizador, trasladando varias décadas atrás a los más jugadores más veteranos. Por otro lado, en las zonas con encuentros contra los E.M.M.I o jefes finales han sabido transmitir la tensión del momento, así como acompañar eficientemente durante la exploración de las diferentes fases.

El juego llega doblado al castellano, teniendo la presencia de las instrucciones de la Federación Galáctica en nuestro idioma, así como escuchar a Samus y otros personajes hablar lenguas complejas de la Galaxia.

En definitiva…

Metroid Dread es con diferencia uno de los mejores juegos del año para Nintendo Switch. MercurySteam ya dejó muy alto el listón con Metroid II: Samus Returns y con mucho esfuerzo han conseguido superar su título en Nintendo 3DS y con creces. Esta aventura tiene prácticamente de todo, los intrincados escenarios dignos de la saga, multitud de armas y desbloqueables, la tensión de los E.M.M.I, una emocionante historia y mucha exploración y acción. Seas o no un fan de la saga Metroid, creemos que Metroid Dread es un título que no debes dejar pasar y al cual dar una oportunidad, siendo el broche de oro a una saga bidimensional con mucha tradición.

*Hemos realizado este análisis con un código de Nintendo Switch facilitado por Nintendo.