Conoce a los comensales de 'Ven a cenar conmigo': Cinco gaditanos de armas tomar

cuatro.com 23/10/2017 21:35

Miriam, un auténtico vendaval gaditano

Esta semana comenzamos cenando en Cádiz, con una anfitriona de lujo, Miriam, un auténtico vendaval. Tiene 35 años, es propietaria de un bar, es divertida, asegura que le gusta sonreírle a la vida y tomarse las cosas con positividad. “En la familia todas las mujeres cocinamos muy bien“, asegura. “Me considero una persona naturista y me encanta hacer nudismo. Puedo chocar con gente de pensamiento tradicional”, explica.

Ángeles Roldán: Tradicional, coqueta y apasionada del tai chi

La segunda candidata es Ángeles Roldán Alcaide, una profesora de español de 49 años. “Me defino como una persona tradicional y un poco coqueta”, asegura. Es una apasionada del Tai chi y aunque tenga la apariencia de una persona muy tranquila, muy serena y muy en control “la tormenta va por dentro y a la fiera hay que domarla”.

Gabi, comercial de peluquería y estríper los fines de semana

El siguiente comensal y candidato en ‘Ven a cenar conmigo’ es Gabi Rojano, un comercial de peluquería y estríper los fines de semana. “A mí no me cuesta ligar nada, la verdad. Para mí ligar es como desayunar por la mañana”, cuenta. “Eso lo sé yo, que soy un chulo”, asegura.

Lolo, contratista y amante de la cocina mediterránea: “La monotonía me mata”

Lolo Peregrina es el cuarto comensal y candidato de esta semana en ‘ven a cenar conmigo’. Es fontanero y contratista, tiene 43 años y se considera un hombre muy trabajador. “Son un géminis puro porque la monotonía nos mata, es mi Kriptonita”, asegura. “Soy un amante de la cocina mediterránea”, cuenta.

Ruth Amaya: “Soy la Mary Poppins de los restaurantes”

La última comensal de esta semana en ‘Ven a cenar conmigo’ es Ruth Amaya, una directora de comunicación de 40 años. “Soy la Mary Poppins de los restaurantes porque durante un periodo de 3 o 4 meses los educo a todos y cuando ya dejamos el restaurante perfectamente funcionando ya nos vamos a otro”, cuenta. “Me siento muy andaluza y enamorada de mi cultura y de mis vinos de Jerez”, asegura.