En España existe un mercado negro del empadronamiento, en el que las mafias estafan a inmigrantes a cambio de dinero. El equipo de ‘Todo es mentira’ ha contactado con las personas que hay detrás de varios anuncios de empadronamiento y ha quedado en persona con uno de ellos.
La reportera se ha visto las caras con el presunto estafador que, sin saber que era periodista, le ha dicho que debían coger el Metro e ir a otro sitio para proceder al empadronamiento, donde ya había otras personas que iban a llevar a cabo el mismo trámite. Le ha dicho que todo el proceso cuesta 150 euros por persona en un único pago y que él, aunque es quien le consigue gente al chico que se dedica al empadronamiento, se lleva una comisión por ello.
Antes de entrar al Metro, la periodista de ‘Todo es mentira’ ha desvelado su profesión, el presunto intermediario le ha explicado que no le pagan por su trabajo, pero que lo que hace es decir a los interesados una cifra superior a la que, en principio, pide la persona que ofrece el empadronamiento.
La reportera le ha dicho que lo que está haciendo está fuera de la ley, a lo que él ha respondido: “Eso me han comentado, que es ilegal”.
Tras ver el reportaje, Risto Mejide ha comentado: “Pillado”.
En las redes sociales abundan las ofertas de falsos empadronamientos. Lo que muchos no saben es que esto puede traer duras consecuencias para quien lo realiza. "Es una práctica habitual desde hace varios años. La multa de los diez mil euros no va para la persona que intenta engañarte, sino para el extranjero. Sin embargo, el delito lo comete la persona que te está cobrando por empadronarte porque hay una falsificación de documento público. Lógicamente estamos en presencia de un delito", contó José María Benito, portavoz Sindical de UFP.