Acosadores arrepentidos y víctimas del bullying intercambian serias confesiones: "Tuve la oportunidad de disculparme con las personas"

En 'Código 10' hemos reunido a un grupo de acosadores arrepentidos con varias víctimas del acoso escolar. Así ha sido su cara a cara
Los padres de Sandra y la madre de Kira, rotos en la manifestación contra el bullying
Naiara, Berta o Cristina saben de primera mano lo que es el monstruo del bullying, esa situación de acoso que genera un ruido silencioso pero tremendamente doloroso. Ellas tres han debatido sobre la cuestión que ahora han denunciado miles de personas en las calles del país tras el suicidio de Sandra Peña -la menor que se quitó la vida como consecuencia del acoso que compartió- junto con Aleix Cortés, psicólogo del Centro Kafka de Barcelona. En el debate, que hemos podido ver en 'Código 10', también participa Guillem, un hombre que reconoce haber sido un acosador en su adolescencia.
"Pasas de ser victima a agresor para protegerte y que nadie pueda volver a hacerme daño", asegura este último, que muestra su arrepentimiento por el daño que generó en otros compañeros. Guillem llegó a pedirle perdón a varios. "Algunos ni se acordaban, otros me dieron las gracias", comparte. Según Berta, las disculpan "sanan" y crean "un buen camino" en mitad de tanto sufrimiento por un problema que sigue vigente.
Naiara abandona el debate tras la emoción de su madre
Pero las heridas permanecen y a veces se convierten en algo irreparable. Así lo hace saber la madre de Naiara, quien relata el duro episodio que sufrió con su hija. "Quiso tirarse por la ventana", lamenta. En este instante, la joven decide levantarse y abandonar por un momento el debate ante la emoción de su madre Carmen. "Se dejó de querer a sí misma", continuaba esta.
Naiara había sido acosada y acosadora. Sabe lo que es sufrir el odio de los que te rodean y pagarlo de la peor forma posible: con más odio. "Si te metías conmigo pues yo me metía contigo, tenía que hacer sufrir el triple", lamenta.
Todos ellos ponen el foco en la inacción ante un problema que no parece cesar. Cristina relata que fue su salida del colegio en el que sufría el acoso lo que le hizo acabar con el dolor. "Fue una salida por la puerta de atrás", dice. Por su parte, Berta lamenta que el "silencio" se convierta "en una manera de contribuir a lo que pasa" en la clase.


