La investigación del crimen de Los Galindos, “una chapuza mayúscula”: los medios de comunicación se colaron en la casa y movieron las pruebas

Cinco trabajadores de una finca fueron asesinados en 1975 en el cortijo de Los Galindos, en Sevilla. El caso está sin resolver
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El crimen de los Galindos ocurrió el 22 de julio de 1975 en el cortijo de Los Galindos, en Paradas (Sevilla). Cinco trabajadores de la finca fueron asesinados, pero el caso no se ha podido resolver.
Las víctimas eran cinco de los trabajadores del cortijo: el capataz Manuel Zapata, su esposa Juana Martín, José González, su esposa Asunción Peralta y el tractorista Ramón Parrilla. ‘Código 10’ ha recordado el caso y cómo se desarrolló la investigación.
El caso no se ha resulto y no se sabe quién llevó a cabo ese quíntuple asesinato. Una de las razones por las que la investigación se complicó fue porque la escena del crimen se contaminó.
La investigación fue “una chapuza mayúscula”
La periodista Amanda González asegura que la investigación del crimen de Los Galindos fue “una chapuza mayúscula” e incluso los medios de comunicación que estaban cubriendo la noticia se colaron en la escena del crimen. “Un equipo de televisión entró en el dormitorio donde apareció el cuerpo de Juanita, la mujer del capataz. Movieron todos los objetos utilizados para el asesinato porque no les entraban en el plano. Cuentan también que la Guardia Civil limpió aquello un poco porque decían que era demasiado escabroso”, explica la periodista.
En ese momento solo se habían encontrado cuatro cadáveres y Zapata era el principal sospechoso. Se decía que había sido un crimen pasional, que le había dado un ataque de locura y que había huido después de perpetrar los cuatro asesinatos. En Parada pensaron que había un loco suelto.
La noticia corrió como la pólvora y muchas personas llegaron al cortijo, dificultando la labor policial. Además de los medios de comunicación se acercó mucha gente del pueblo con intención de ayudar, pero al final la escena del crimen se contaminó, dificultando que se pudieran recabar más pruebas.
Más tarde se descubrió también el cuerpo de Zapata, por lo que las líneas de investigación tuvieron que cambiar. No ha podido hallarse al culpable.

