Una treintena de provincias están en alerta por tormentas, viento y granizo

La lluvia, el granizo y el viento son los protagonistas indiscutibles de las últimas horas, sobre todo en el este y sureste peninsular. El viernes las calles de Mataró se convirtieron en ríos e inundaron los bajos de muchas casas. Los Bomberos de Cataluña atendieron centenares de llamadas por incidentes causados por las tormentas. El más grave de la comunidad ocurrió en Granollers, donde el agua y el viento arrancaron parte del tejado metálico de este edificio. No causó heridos pero sí muchos daños materiales.

Las tormentas también han llegado a la Comunidad Valenciana. En Elche, los coches casi no podían avanzar por las calles. Algunos conductores quedaron atrapados en sus vehículos. Y a pocos kilómetros de allí, en Guardamar del Segura, una manga marina se formaba bajo la atónita mirada de los bañistas. En Bellreguard, un rayo, al parecer atraído por una moto acuática, hirió a dos bañistas. La rapidez de los sanitarios consiguió estabilizarlos a tiempo... y ya han sido dados de alta.

El fin de semana una treintena de provincias permanecen en alerta amarilla por riesgo de tormentas. Lo peor se espera en Andalucía, donde ya ha causado los primeros daños.

El motivo de esta inestabilidad temporal tiene nombre propio: DANA o, más comúnmente conocido, como gota fría. En las capas más altas de la atmósfera se condensa el aire frío que choca con el calor y la humedad de las capas más bajas provocando lluvias, granizo y viento, sobre todo en la zona del Mediterráneo y dejando imágenes como estas a pocos días para que termine el verano.