El Papa reivindica en Suecia la unidad de los cristianos

Durante su segundo discurso en Suecia, Francisco ha precisado que el camino emprendido para lograr la unidad es un regalo divino. Y ha subayado: "Gracias a la ayuda de Dios estamos hoy aquí reunidos, luteranos y católicos, en espíritu de comunión, para dirigir nuestra mirada al único Señor, Jesucristo".

Acto seguido, el Pontífice ha pedido que se profundice en la "comprensión recíproca", que se genere "mutua confianza" y "el deseo de caminar hacia la comunión plena". Así, ha señalado que uno de los frutos de este diálogo es la colaboración entre distintas organizaciones de la Federación Luterana Mundial y de la Iglesia Católica.

Gracias a este nuevo clima de entendimiento, Caritas Internationalis y Lutheran World Federation World Service que han firmado una declaración común con el fin de "desarrollar y consolidar una cultura de colaboración para la promoción de la dignidad humana y de la justicia social".

Durante su discurso, el Papa ha expresado su "consternación" por los abusos que dañan nuestro planeta, nuestra casa común, y que "generan graves consecuencias también sobre el clima".

Asimismo ha subrayado que "los mayores impactos recaen a menudo sobre las personas más vulnerables y con menos recursos", y "son forzadas a emigrar para salvarse de los efectos de los cambios climáticos". Por eso Francisco ha recordado que "nuestro estilo de vida", "nuestros comportamientos" deben ser coherentes con nuestra fe. Y ha añadido: "Estamos llamados a cultivar una armonía con nosotros mismos y con los demás, pero también con Dios y con la obra de sus manos".

Finalmente, el Papa se ha referido a la ciudad siria de Alepo, que ha definido como "extenuada por la guerra, donde se desprecia y se pisotean incluso los derechos más fundamentales". "Las noticias refieren cotidianamente el inefable sufrimiento causado por el conflicto sirio, que dura ya más de cinco años", ha señalado. Por ello, ha reconocido que es "verdaderamente heroico" que permanezcan allí hombres y mujeres para prestar asistencia material y espiritual a quien tiene necesidad.